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Recientemente “nos llamó la atención con temeridad, cuando desde la Fiscalía exigían a unos medios escritos de comunicación de la ciudad capital revelar sus fuentes de información y nos preguntamos: ¿con qué objetivo?”. Agregó que dio la impresión de que se quería amedrentar a dichos medios de comunicación, afirmó el obispo Escobar.
Explicó que estos medios de comunicación quieren vivir su ser, luz y sal, llegando a la verdad de las cosas y, a través de sus artículos e iluminación, dar luz para que no se robe más dinero que pertenece a todos los paraguayos”, insistió el religioso.
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Seguidamente, el obispo Gabriel Escobar sostuvo: “No queremos volver a los tiempos de la dictadura, donde se cerraban medios de comunicación y se amedrentaba a la prensa escrita, oral, televisiva e inclusive desaparecían algunos”. Al contrario, “debemos ayudar a que todo lo oscuro, escondido, salga a la luz y se esclarezca para el bien de todos”.
Por ejemplo, indicó, “queremos saber qué pasa con el Instituto de Previsión Social (IPS) y el futuro de sus asegurados, la Caja de Jubilaciones, la próxima renovación del Anexo C de Itaipú, los robos que hubo en plena pandemia... Estos casos deben salir a la luz. No podemos ser indiferentes; por algo decimos que la prensa es el cuarto poder”.
Inseguridad
El obispo también habló de la inseguridad reinante en todo el país y por supuesto en el Alto Paraguay, como los robos, asaltos al estilo comando, violencia, vizcacheros, abigeatos, entre tantas otras situaciones.
“Nuestra preocupación por nuestros jóvenes que están hipotecando su futuro a consecuencia del consumo de drogas, situación que los está acabando de a poco, es donde nos preguntamos qué pasa con nuestras instituciones públicas y privadas. Deberían trabajar en conjunto para vencer a este flagelo”, apuntó.
Hoy en Puerto Casado, a diferencia de unos 10 años atrás, existe en la comunidad instituciones como el Poder Judicial, Fiscalía, Defensoría del Menor, entre las principales, pero -según el obispo- no se siente que ayuden a vencer la presencia de los pequeños traficantes de drogas dentro de la población.
“Queremos que la Justicia sea más expeditiva”, señaló Escobar, al tiempo de recordar un caso de accidente en los caminos de esa comunidad donde falleció un indígena maskoy y hasta la fecha no existe ninguna persona condenada. “¿Será que la vida nuestra no vale o tenemos paraguayos de primera, segunda y tercera clase?”, refirió el religioso.
Finalmente, el obispo también pidió a las autoridades mayor eficacia para tratar de acabar con los feminicidios. “Esto no puede seguir sucediendo en un país pequeño, es una verdadera locura lo que nos indican las estadísticas. ¿Qué pasa con el protocolo que se debe aplicar en cada denuncia de violencia entre el varón y la mujer?”, se preguntó el religioso.
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Procesión
Esta mañana se realizó la tradicional procesión de la sagrada imagen del santo patrono San Ramón Nonato por las principales calles de la comunidad, acompañada de una gran cantidad de fieles católicos.
La misa central se realizó en el tinglado de la parroquia, debido a la presencia de numerosas personas que llegaron para la celebración.