En medio de la crisis de financiamiento de la ANR, tras las sanciones económicas a su presidente, Horacio Cartes, y las maniobras internas para evitar que estas afecten a la economía partidaria, el jefe de campaña adjunto de la lista 1, Arnaldo Franco, dijo estar convencido de que los bancos darán respaldo al partido.
Señaló que de eso se están encargando las personas designadas y aseguró que cree que se está avanzando y una vez que se tenga una respuesta van a tener la información oficial.
Franco dijo que hasta ahora no hay negativa, pero todavía no se hicieron las presentaciones oficiales de los pedidos y que se están realizando los trámites para llenar los requisitos y presentarlos.
Con respecto a lo que dijo Lilian Samaniego, que pediría la renuncia de Cartes, señaló que es una posición personal de la senadora, que él está concentrado en la campaña y que no quiere entrar en la polémica de esas opiniones.
Bancos responderían en dos semanas
Señaló que, hasta donde sabe, entre el jueves y viernes pasado se habrían firmado los documentos para ser remitidos a los bancos, algo que -aseguró- se haría esta misma semana.
Teniendo en cuenta oportunidades anteriores, cree que para dentro de 12 a 15 días estarían teniendo oficialmente las respuestas de los bancos.
Efecto electoral e institucional de las sanciones de EE.UU.
Franco, ex secretario privado de Cartes, señaló que tomó con mucha sorpresa las sanciones contra el expresidente, aunque admitió que siempre se escucharon cosas, pero no esperaba. Dijo que no solamente en Paraguay se están tomando este y otro tipo de medidas, pero que esperará hasta la fecha límite que había anunciado el Gobierno de Estados Unidos para ver qué más sucede.
Aseguró que no cree que electoralmente esto afecte al partido, pero si es que llega a pasar algo más grave podría afectarlo institucionalmente. Dijo que en el partido están abocados a la campaña y en el trabajo de la unidad de los equipos. Reconoció que estas sanciones sí podrían afectar al voto no colorado, aunque dijo que preferiría esperar hasta las elecciones para ver las consecuencias.