En cuanto al nivel de utilización argentina de la energía de la central binacional en los primeros trimestres de los tres años, decreció un 50,3% este año.
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Suministra el 12%
Del último Informe mensual del Viceministerio de Minas y Energía, se desprende que el mercado paraguayo (SIN), incluyendo la aún alta tasa de pérdida de la ANDE, consumió 18.583.703 MWh en 2021. Del consumo del mercado paraguayo en 2021, equivalente en ese ejercicio a la producción de 30 centrales como Acaray, Yacyretá aportó el 12% (2.313.688 MWh).
No obstante, el mayor peso de esa demanda, 85% (15.794.730 MWh) es aún sostenido por Itaipú. El 3% (623.054 MWh) que falta para completar el esquema de fuentes en las que abrevó la estatal, provino de la hidroeléctrica nacional Acaray. Las tajadas de la torta que el SIN demandó en 2021 prueban que el suministro de Yacyretá, comparativamente, está lejos aún de la relevancia que debería tener.
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El incremento del 70,3% de la tasa de aprovechamiento paraguayo de esta energía, pese al fuerte bajón que se registró en la producción del complejo paraguayo/artentino, es un buen síntoma.
Cesión, subtarifas y morosidad
La mayor utilización de la energía de Yacyretá en el mercado local es un buen síntoma, porque si midiésemos el peso real de cada metro cuadrado de territorio paraguayo inundado en la generación de esta central, a la actitud de la población paraguaya, no solo ante la insólita morosidad argentina en pagar al Paraguay la “compensación” que le corresponde por aprovechar gran parte de la energía que le pertenece, sería muy diferente.
No se trata solo de la “compensación por cesión”, injusta desde el ángulo que se la mire, también de la “compensación en razón de territorio inundado”, que según el Tratado integra el costo de producción de Yacyretá y que nunca fue pagada, a pesar de que a la fecha supera holgadamente los US$ 1000 millones.
Un 79%
Según el informe de las oficinas técnicas paraguayas de la entidad binacional referente al primer trimestre del actual ejercicio, la energía que retiró la ANDE entre enero y marzo de 2020 y enero y marzo de 2022 se incrementó en un 79,3%. Asimismo, si observamos la columna del suministro al sistema argentino (SADI), veremos que en 2022 hubo una reducción del 50,3% con relación al primer trimestre de 2020.
¿Se sostendrá esta tendencia? en el sector Energía de nuestro país hay dudas, porque la conducta de la ANDE con relación al aprovechamiento de la producción de Yacyretá fue llamativamente cambiante. En efecto, los datos exhiben como un pico prometedor de consumo en un determinado mes se derrumbaba estrepitosamente en el siguiente a la mitad o a la cuarta parte del nivel que había alcanzado.