Vapeadores sin registro sanitario se venden con normalidad en el país

Con distintas marcas y precios, cigarrillos electrónicos que tienen un nivel de nicotina por encima de lo permitido se venden en cualquier comercio. No existe un sistema de trazabilidad que garantice la calidad de estos productos, que se importan en cantidades industriales. Desde el Ministerio de Salud aseguran que estos equipos tendrían un efecto más nocivo que el cigarrillo convencional.

https://cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/abccolor/N5VGATGPFJFZNFXLQPFLCRU3T4.JPG
Gentileza

Cargando...

El negocio de los cigarrillos electrónicos en Paraguay está desbordado.

Si bien hay reglas establecidas para intentar tener un control mínimo, lo concreto es que el mercado local está inundado de equipos de vapeadores que tienen concentración de nicotina por encima de lo que la reglamentación establece.

Actualmente, la resolución N° 153/2021 de la Dirección Nacional de Vigilancia Sanitaria (Dinavisa) regula el ingreso de estos productos. Uno de los requisitos fundamentales para que se puedan importar estos vapeadores es que tengan, como máximo, 20 mg/Lm (2%) de nicotina en su carga líquida.

Sin embargo, distintos comercios, ya sea grandes o pequeños, incluso cadenas comerciales, venden estos productos que presentan en su propia caja la advertencia de que el material tiene 5% de nicotina.

Esto demuestra que dicha mercadería ingresó al sistema comercial de manera ilegal, ya que un producto de este tipo no puede tener el registro sanitario que otorga Dinavisa para que se pueda comercializar.

La comercialización de estos productos se da en todo el país, pero hay puntos específicos, como Ciudad del Este, en donde se los puede encontrar en cualquier tienda de calle o vereda.

Altos números de importación

Datos de la Dirección Nacional de Aduanas (DNA) indican que entre enero de 2022 y junio de 2023 se importaron oficialmente 1.572.959 vapeadores, según la partida arancelaria que corresponde a este producto. Esto es lo oficialmente registrado.

Sin embargo, existiría una cantidad mucho mayor en el ingreso de estos productos a través de otras partidas arancelarias, al menos hasta el 2021, cuando se reglamentó la comercialización de estos productos.

Esto podría explicar la presencia de miles de vapeadores que tienen, en plena cajetilla, la inscripción de un porcentaje de nicotina superior a lo permitido en la reglamentación sanitaria del país.

Con estos productos vendidos sin registros es imposible hacer una trazabilidad de los mismos.

Es decir que no se puede saber su origen ni apreciar cuáles fueron los estándares utilizados en la fabricación, con el fin de determinar qué empresa los importó, cuánto pagó por ellos y los impuestos que se tuvieron que pagar.

Más perjudicial que el cigarrillo convencional

“Lo que pude escuchar de los compañeros del área es que tiene un efecto peor que el cigarrillo convencional desde el punto de vista de que tiene más potencia concentrada y también es la puerta de entrada a otras sustancias”, señaló ayer el doctor César Cristaldo, director general de la Dirección Nacional de Vigilancia Sanitaria (Dinavisa), en conversación con ABC Cardinal.

Según Cristaldo, como estos productos son relativamente nuevos, las patologías recién aparecen ahora.

Actualmente, Dinavisa tiene registrados a 28 importadores, oficialmente habilitados para que puedan comercializar estos productos en Paraguay.

El profesional advirtió que se trata de una nómina que aún falta actualizar, pero que, por lo general, es la cantidad promedio de empresas que operan con estos productos.

Población joven

Un informe del Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social (MSPSB) de diciembre de 2022 señala que el 12,5% de la población en el país consume cigarrillos electrónicos. La mayoría de estos consumidores son jóvenes.

El documento del Ministerio revela que al menos el 14,5% de la población paraguaya es fumadora de algún tipo de producto de tabaco.

Ocho países prohíben vender

Un informe de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) señala que hay 21 países de las Américas que regulan, de algún modo, la comercialización de estos productos. De este total, ocho directamente prohíben su venta al público.

El último país que se sumó a esta lista fue Venezuela, que de esta manera se une a Argentina, Brasil, México, Nicaragua, Panamá, Surinam y Uruguay. Estas naciones prohíben no solo vender sino también fabricar estos productos, según el informe de la OPS. Paraguay se encuentra entre los países que “regulan” su comercialización.

Enlance copiado
Content ...
Cargando...Cargando ...