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Lo que ocurre en el Ministerio Público puede resumir la desigualdad que existe en el sistema de empleo estatal. Mientras en la Fiscalía, cerca de 200 funcionarios no cobrarán aún sus sueldos del mes de enero de 2024, pese a que pasaron por un concurso público, compitiendo entre otros 600 postulantes para lograr nuevos cargos o ascensos, en el Congreso Nacional ocurre todo lo contrario; Cada uno de los familiares de políticos -que accedieron a estos lugares solamente por ser parientes- cobraron hasta el último guaraní de sus remuneraciones correspondientes.
Problema “burocrático” en la Fiscalía
La respuesta oficial que dio la Fiscalía a sus funcionarios fue que se habría tenido un error involuntario en la gestión documental que se envió al Ministerio de Hacienda, por lo que la estructura salarial no correspondía.
Según algunos de los afectados, hubo la promesa, a través de los sindicatos locales, de que, para el 15 de febrero próximo estarán percibiendo sus salarios correspondientes al mes de enero último.
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En noviembre de 2023, un total de 120 funcionarios de la Fiscalía accedieron al cargo misional de asistentes fiscales, mediante un concurso de oposición interno.
Habían participado de este concurso unos 686 aspirantes, funcionarios de diferentes oficinas del Ministerio, distribuidos en todo el país.
También hubo otros cargos que se buscaron cubrir a través de concursos de oposición, como coordinadores, secretarias, auxiliares, por lo que la cantidad de funcionarios con nuevos cargos en el Ministerio Público a cerca de 200, según datos que fueron recabados por nuestro diario.
Brutal diferencia con pago a “nepobabies”
Lo que ocurre con estos funcionarios fiscales es diametralmente opuesto con los “nepobabies” en el Congreso Nacional.
Allí, los hijos del poder han accedido a cargos sin ningún concurso y no tienen problemas para recibir sus sueldos en forma puntual.
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Quizás, el caso más emblemático es el de Montserrat Alliana, hija del vicepresidente de la república, Pedro Alliana, que fue comisionada del Ministerio de Justicia a la Cámara de Diputados, pasando a ganar de G. 6.000.000 a G. 18.274.300.
Montserrat Alliana ni siquiera era profesional cuando fue comisionada a Diputados, donde fue designada “asesora” el 22 de setiembre de 2023. En su propio legajo figura que terminó la carrera de “Relaciones Internacionales” en la Universidad San Sebastián, recién en diciembre de 2023.
Otro caso llamativo se dio con Elías Martín Godoy Torres, hijo de la diputada Roya Torres (PLRA-cartista), que con apenas 19 años fue ubicado con el cargo de “asesor” en la propia oficina de su madre, ganando unos G. 9.500.000 al mes.
Mintieron sobre sus renuncias
Tras un pedido de acceso a la información pública realizado por ABC Color, la Cámara de Diputados informó que los hijos de los diputados liberales Cleto Giménez y Roya Torres, seguían como funcionarios de la institución, pese a que ambos parlamentarios habían anunciado que sus hijos renunciarían.
En el caso de Cleto Giménez, se confirmó que una de sus hijas, Johana Denisse renunció, pero la otra, Danna Maricela Giménez, se mantuvo en su cargo en Diputados.
Cobraron G. 428 millones en cuatro meses
De septiembre de 2023 a diciembre de 2023, los hijos del poder, o “nepobabies”, ubicados a dedo en el Congreso Nacional por sus padres parlamentarios, cobraron entre sueldos y aguinaldos unos G. 428 millones, según datos oficiales del portal público del Ministerio de Hacienda.
En principio, se registraban 12 casos de hijos de diputados o senadores que habían sido nombrados o contratados en el Congreso. Sin embargo, la renuncia de Alejandro Ovelar, hijo del senador cartista Silvio “Beto” Ovelar, a finales de diciembre de 2023, redujo la nómina a 11 “nepobabies” finalmente.
Sin imputaciones en caso nepotismo
La Fiscalía General anunció la creación de un equipo especial conformado por los agentes Diego Arzamendia, Francisco Cabrera y Jorge Arce, para investigar los supuestos casos de nepotismo o tráfico de influencias. Hasta el momento no se informó de imputaciones.