Los raudales

Como con cada lluvia de intensidad importante, los arroyos de Asunción, Lambaré, San Lorenzo, Luque, crecieron, la basura taponó los escasos desagües existentes y los raudales arrastraron gente y vehículos. Solo que una vez más, la negligencia de autoridades con otros intereses -que no son el bien público-, costó la vida de ciudadanos.

Cargando...

Todas las veces que llueve con intensidad, en Asunción y Gran Asunción los raudales aparecen. Esta semana, una señora de la tercera edad fue sacada en andas de su vehículo, que flotaba, en San Lorenzo; familias del Bañado Sur sufrieron la inundación de sus casas, producto del rápido desborde de arroyos y del río Paraguay, la Estación de Buses “chorreó” en sus goteras. Pero esta vez los ojos estaban puestos en Lambaré: dos militares viajaban a bordo de una camioneta cuando fueron arrastrados por el raudal que se formó sobre una avenida y en cuestión de minutos terminaron cayendo al arroyo Lambaré.

La camioneta fue encontrada enterrada, casi un kilómetro aguas abajo. Ayer, el cuerpo de uno de sus ocupantes fue hallado también. De su compañero, nada se sabía al momento de escribir estas líneas.

Mientras, en otros puntos del país, tornados, granizadas y crecidas de cauces hídricos dejaron 35.000 damnificados y una niñita fallecida.

En estos duros momentos para el país, ¿dónde estaba el gobierno nacional, a cargo de Santiago Peña y -no cabe duda- Horacio Cartes?. Haciendo grupos de oración con organizaciones religiosas a las que no les cumplieron la promesa de derogar un acuerdo con la Unión Europea, pero sí les vienen cumpliendo el avance en la implementación del plan que proponen para la educación sexual en escuelas y colegios públicos, con contenido muy poco científico, con sesgos religiosos y machistas.

En Lambaré, los vecinos cuentan que atan sus vehículos para que nos los lleve el raudal, pero el intendente, Rosa “Guido” González (ANR), se excusa diciendo que el problema viene de administraciones anteriores. Es el mismo intendente al cual la concejala opositora Osmayra Pereira (FG), denunció por persecución política. Despidieron funcionarios de su equipo como venganza, dijo ella. Y la edil Carol González (ANR) confirmó que en las direcciones de la Intendencia tienen la orden de no recibir a quienes trabajan con Pereira.

O sea, tanto el colorado “Guido” en Lambaré como todo el gabinete del colorado Santiago Peña, están muy lejos de concentrarse en las medidas que urgen para poder enfrentar en mejores condiciones los efectos de “El Niño” y del cambio climático. Ellos tienen sus propias agendas. Ni ahí están con las necesidades de la gente que los eligió. Parafraseando al gran Maneco Galeano, en su tema “El Ejecutivo”: ojalá que llueva... y les lleve el raudal.

Enlance copiado
Content ...
Cargando...Cargando ...