Varios referentes, expertos y economistas se sumaron a las reflexiones que deja este segundo grado de inversión tras la mejora de calificación desde BB+ a BBB- por parte de la agencia Standard and Poor´s.
A su vez, el economista y ex ministro de Hacienda César Barreto destacó en una entrevista en la 1080 AM que este logro es fruto de “muchos años de una administración fiscal y monetaria ordenada”, lo que –según sostuvo– va consolidando al país como “uno de los más confiables en términos de capacidad de pago de su deuda pública”.
No obstante, también se refirió sobre algunos desafíos que tenemos a nivel país como servicios más eficientes para la ciudadanía y que lastimosamente se ven postergados por decisiones políticas que tienden mayormente a priorizar los intereses particulares, para favorecer el prebendarismo que sigue siendo un gran mal que daña la imagen y los recursos públicos.
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Decisiones políticas que garanticen la transparencia y eficiencia
Explicó que, a su juicio, faltan decisiones políticas que garanticen un uso más eficiente y transparente de los recursos públicos.
Añadió que en las condiciones actuales, sobre todo por el manejo político, será difícil plantear alguna reforma para aumentar impuestos porque no hay confianza. “No es viable la inversión en estas condiciones por más grado de inversión que tengamos” alertó.
Planteó el riesgo de que los aportes de los contribuyentes terminen en “un barril sin fondo” y advirtió que, de seguir así, podría no quedar dinero suficiente “para salud o para pagar a las contratistas”, como es el caso que estamos viviendo actualmente por el atraso en pago a contratistas.
El economista mencionó el riesgo de que los aportes de los contribuyentes terminen en “un barril sin fondo” y advirtió que, de seguir así, podría no quedar dinero suficiente “para salud o para pagar a las contratistas”, como estamos viendo en la actualidad.
Según su análisis, “esa es la parte que está fallando” y responsabilizó directamente a la clase política, a la que acusó de haber fracasado en la administración de estos temas. Además, señaló que los políticos “no lo reconocen y no quieren cambiar”.
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A lo largo de sus declaraciones, Barreto vinculó el nuevo grado de inversión con la necesidad de reformas internas que mejoren la gestión pública y la confianza ciudadana.
Aunque celebró el reconocimiento de Standard and Poor’s y la trayectoria de disciplina fiscal y monetaria, reiteró que sin cambios en la conducta de la clase política y en el uso de los recursos públicos, será difícil sostener mayores aportes de la población o atraer inversión en un marco de verdadera confianza.