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Es uno de los postres más exitosos que existen. También lo llaman "suflé de chocolate" o "volcán de chocolate" o incluso "paradise de chocolate" Y esto es porque, además, es el postre más copiado del mundo. Pero sucede que el coulant (que en francés es el pasado del verbo "fluir") tiene una patente registrada por su autor en 1981, el cocinero francés Michel Bras, aunque en cocina, las patentes todavía no son un certificado de propiedad absoluta. Se trata de un delicioso bizcocho caliente con corazón de chocolate fundido. "Que me pirateen no es problema, era fácil de imaginar -dice Michel Bras-, pero la intensidad de la emoción que sentí al sacar el primer coulant del horno nadie me la puede robar". Bras también ha hecho historia culinaria con otros platos como el "Gargouillou", con 30 verduras, flores y brotes de verduras, siendo la primera vez que un cocinero se atrevía a colocar flores comestibles en una receta. "El postre sigue la misma suerte que la cocina; lo más importante es la armonía. Tiene que ser inteligente y goloso", dice este cocinero premiado con tres estrellas Michelin. Lo descubrió "por casualidad" cuando volvía a su casa después de una gélida jornada de ski con toda su familia. Según cuenta, sus hijos estaban helados y para calentarlos se le ocurrió este postre con el chocolate fluido (coulant). Para muchos, es el súmmum de la repostería, el postre ideal para culminar cualquier comida o cena. Este pastel chorreante encierra un peligro mortal, pues dan ganas de comerse una docena. El secreto del éxito radica en la temperatura por lo que es mejor prepararlos justo antes de comerlos. Esta no es la receta original de Michel Bras, ya que la suya es un poco más complicada, debido a que en el interior se tiene que introducir un bombón helado de chocolate. Sin embargo, con esta receta más sencilla, el resultado es muy parecido.
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