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“Me dirijo a Ud. con relación a la publicación titulada ‘Anulan demanda contra el Estado instaurada por ex titular de Conajzar’ el 22 de agosto último, en la cual ABC Color publicó información infundada, errónea, distorsionada y falsa en razón de los siguientes:
Porque es diferente declarar la nulidad de la sentencia de Primera Instancia, la cual rechazó la demanda y de todo el procedimiento anterior y disponer que la parte actora ocurra ante el órgano jurisdiccional que corresponda, a que ‘se anula la demanda contra el Estado’ o que se ‘declaró la nulidad de juicio’ y que ‘decidieron poner fin al juicio resarcitorio’, tal como fue publicado.
Porque el sentido de la decisión de nulidad de la Sentencia de Primera Instancia del Tribunal de Apelación, ha favorecido mis pretensiones. En Primera Instancia había rechazado mi demanda. En Segunda Instancia, el Tribunal en su decisorio anuló tal Sentencia, inclusive la que me condenaba al pago exorbitante de honorarios pretendidos por la contraparte.
La demanda NO fue instaurada en mi carácter de extitular de Conajzar, SINO como Coordinadora de la Unidad de Investigación Interna del Ministerio de Hacienda, cargo del que fui primero separada y sancionada con la destitución en el año 2010 y posteriormente sobreseída en sumario administrativo, en incumplimiento del art. 43 de la Ley 1626/00.
Ingresé a la función pública por Concurso de Méritos y fui funcionaria de carrera de esa Cartera, con estabilidad laboral. La Coordinación no constituye cargo de confianza (art. 8 de la ley 1626/00).
Todos estos hechos, debían haber sido de conocimiento de ABC Color antes de la publicación hoy cuestionada. Tan solo faltaba cumplimiento del procedimiento correcto, a todas luces soslayado por este diario, de dar oportunidad de descargo a la persona afectada ANTES de la publicación de una única versión infundada, errónea, distorsionada y falsa de la misma.
Se exige, como buena práctica de periodismo y de calidad de información, que ésta debe reunir las condiciones de veracidad, responsabilidad y ecuanimidad que se exige en toda sociedad civilizada y que debe engalanar la actividad profesional de informar, la cual evidentemente ha sido conculcada en este caso y en otros anteriores, pisoteándose gravemente de esa manera mis derechos ciudadanos.
Correspondería al Estado, eventualmente, la repetición de pago contra aquellas autoridades que permitieron y promovieron las sucesivas violaciones del marco jurídico vigente, quienes se escondieron detrás de otros funcionarios, demostrando su ineptitud, miseria y falta de escrúpulos.
La notoria persecución por parte del diario ABC Color hacia mi persona vulneró los derechos establecidos en los artículos 22, 23, 28 de la Carta Magna, al publicar de manera infundada, errónea, distorsionada y falsa información, con mi nombre y fotografía; y consecuentemente perjudicó de manera directa mi ámbito profesional, familiar y personal. Me reservo las acciones judiciales y los demás derechos compensatorios correspondientes.”, finaliza la carta.