No quiero que todo sea perfecto, porque es imposible; solo quiero un poquito más de ganas de la gente, si al final es para beneficio de todos, respetemos las normas básicas normales de una ciudad, va a ser más ordenada, agradable, menos estresante.
Esto ocurre todo el tiempo, se gira donde no se debe, se estaciona donde está prohibido, se cruza por donde no hay franja peatonal y todos colaboramos un poco con el caos que es la ciudad, normalizando la situación.
Marcos Lares
