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Aunque los cariocas esperaban garantizarse el boleto con este triunfo vital, la resurrección previamente en esta noche del San Lorenzo de Argentina al derrotar 3-0 en Curitiba al Atlético Paranaense dejó abierto el ’grupo de la muerte’ hasta su jornada final, en la que el ’Fla’ se verá las caras con los argentinos en Buenos Aires.
A falta de Diego, un estelar Paolo Guerrero fue la referencia del equipo con más afición de Brasil, que se fue al descanso con un decepcionante marcador en ceros pese a nueve ocasiones de gol del peruano.
Empujado por su actuación y por el poderío del mítico estadio carioca, el Flamengo se puso líder del Grupo 4 de la Libertadores con 9 puntos, perseguido a dos por los argentinos y el ’Furacao’. Los ’cruzados’ son últimos con 5 unidades.
Toselli no lo puso fácil en la portería chilena, pero el primer gol del ’Mengao’ llegó apenas empezaba el segundo tiempo.
Recién entrado al campo en el lugar de Manucuello y con un equipo mucho más organizado, Rodinei (50) abrió el marcador para los brasileños al rematar con la izquierda un disparo de falta de Guerrero que había chocado contra la barrera.
Los más de 60.000 espectadores del Maracaná rugieron de una alegría... que duró poco.
Los ’cruzados’, que tuvieron su ocasión más clara en la primera parte con Fuenzalida, lograron el empate gracias, una vez más, a Santiago Silva (67) .
El estadio temblaba recordando la derrota 2-1 de la semana pasada ante el Paranaense, que costó el liderato del Grupo 4 al Flamengo. Pero, finalmente, llegó el gol que se le resistió tantas veces a Guerrero.
El peruano recibió por la derecha y, con un disparo cruzado al palo izquierdo, hizo respirar con más calma a una afición que animó a los rojinegros sin parar.
El segundo gol para la Católica podía haber llegado poco después gracias a una jugada iniciada por Noir, pero los de Zé Ricardo siguieron presionando hasta que otro peruano apareció para desatar la locura en Rio.
Solo, y tras un drible que parecía imposible, Trauco marcó el gol definitivo para los brasileños, obsesionados con hacer de esta Libertadores su regreso triunfal a la élite del continente tras años de convulsiones.
Nada es fácil en este imprevisible cambio de guión del ’grupo de la muerte’.
Después de sus naufragios en la fase de grupos de las últimas tres ediciones en las que participó desde 2002, el ’Fla’ tendrá que definir su pase fuera de casa y con la sensible ausencia de Pará por acumulación de amarillas.
Podría pasar octavos si empata el próximo miércoles ante el repotenciado San Lorenzo. Pero si perdiera, deberá cruzar los dedos para que el otro equipo brasileño le tienda la mano... perdiendo ante la Universidad Católica.