En un trágico accidente producido el 28 de abril en Delray Beach, Florida, Gilberto Martínez perdió a su esposa Verónica Raschiotto, de 42 años, y a sus dos hijos Diego, de 8, y Mía, de 6.
La familia de Gilberto había viajado a Estados Unidos para visitar a Jorge, hermano de la mujer, quien también falleció en el suceso ya que se encontraba en la minivan que fue embestida por una camioneta pickup conducida a excesiva velocidad.

La tristeza y el dolor invadieron a Gilberto quien quiso cancelar el viaje a Rusia que había planeado hace tiempo con su familia. No obstante, por recomendación de su psicóloga y el apoyo de sus seres queridos decidió continuar con el que fuera el sueño de su esposa e hijos, todos amantes del fútbol.
“Para cerrar el único tema pendiente en una familia hermosa. Cumplir el sueño de los cuatro y el de mi hijo, Diego, que iba a estar en su primer Mundial y en el sexto mío", explicó.
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Un hecho que fue determinante para continuar con el viaje fue el mensaje de Guillermo Ochoa que recibió. "Cuando yo estaba camino a la funeraria, me mandó un mensaje clave: 'tu hijo va a ser un ángel que me ayude a volar'. Gilberto y Memo ya habían tenido un contacto anterior gracias al representante del portero. Cuando Diego cumplió 5 años el arquero le envió un saludo.
Según lo que recoge Clarín, el hincha mexicano acudió al máximo evento futbolístico a nivel de selecciones en compañía de sus amigos. “Fue muy difícil llamar a la aerolínea y a los hoteles y pedir que cambien los nombres de los pasajes y reservas. Vinieron dos amigos en lugar de ellos”, señaló.
Destacó que no se cambió nada del viaje para respetar lo planeado: viajó en tren y no en avión de Moscú a San Petersburgo “porque así lo quería Vero”. También estuvo en el encuentro de Argentina-Islandia y Brasil-Costa Rica porque su hijo quería ver a Lionel Messi y Neymar.

Gilberto presenció el histórico triunfo de México sobre Alemania el pasado 16 de junio. “El partido de México fue terrible. Día del Padre. Era muy difícil. Era el momento de llegar, de vivirlo, de pensar en ellos. Hubo momentos muy fuertes, el momento del gol, el himno, cuando termina el partido. Drené mucho y saqué mucho. Este es un viaje que cada momento tiene un recuerdo”, manifestó.
Tras este encuentro, Ochoa volvió a escribirle por WhatsApp. “Esto fue por tu familia”, le dijo el portero. Por último, indicó que nada quiere saber del trágico hecho. “No miré cuando salió en las noticias. No quise leer nada en la web. Es que lo último que necesito y quiero es sentir odio o buscar culpables. Lo único en lo que me preocupé en saber, y lo sé, es que la muerte fue instantánea. Que no sufrieron”, concluyó.
