Intentó, pero no pudo

El auriazul tenía la misión de levantar el 0-3 del partido de ida en Colombia. Félix León puso un equipo con tinte ofensivo para poder llegar a los goles. Luqueño tenía que ser equilibrado para intentar mantener el cero en su arco.

Los jugadores de Luqueño comenzaron muy acelerados el partido, como queriendo hacer todo muy rápido para llegar al gol, el DIM estaba jugando de manera tranquila pero sin poner en aprietos al equipo paraguayo.

Luqueño contó con nas posibilidades para marcar, no podía pero llegó el penal cobrado por el árbitro del partido que Vladimir Marín transformó en gol. Ese tanto le dio otro aire a Luqueño, fue con todo en busca de llegar a más goles para intentar igualar la serie.

El equipo colombiano tuvo algunas insinuaciones pero no fueron muchas, Luqueño se iba con todo al ataque, recuperaba rápido la pelota y llegaba con peligro hasta el arco de su rival. Los colombianos comenzaron a pegar y eso hizo que el público se tome con el árbitro chileno Tobar.

Cuando estaba terminando el primer tiempo, Derlis Alegre pudo llegar al segundo. Fue después de un tiro de esquina, Alegre remató, vino el rebote y de nuevo la pelota llegó hasta él para vender por segunda vez el arco colombiano.

El inicio de la segunda etapa fue bueno para el local. Empujado por su hinchada fue a buscar el gol que pueda igualar la serie, pero los colombianos querían salir un poco más y Mauricio Molina era el que guiaba los ataques del DIM.

Deoco los colombianos fueron acercándose a la valla de Rodolfo Rodríguez que tuvo que esforzarse para desviar tras un cabezazo de Cabezas. Después tuvieron un par de tiros de esquina donde complicaron por arriba a Luqueño.

A los 59 minutos, Molina estuvo muy cerca del descuento, pero su remate se fue afuera, muy cerca del palo de Rodríguez. Luqueño pudo llegar al tercero en un tiro libre de Marín pero de contragolpe, tras una falla de la defensa auriazul Molina estuvo a punto de marcar cuando el arquero salió muy lejos a buscar la pelota.

Rodolfo Rodríguez se fue convirtiendo en jugador importante para su equipo, es que cada ataque de los colombianos eran peligrosos pero el arquero se mostraba muy seguro. A los 73 minutos pudo llegar el empate enave de Luqueño tras un centro desde la derecha y Cristhian Ovelar cabeceó afuera cuando estaba en una buena posición para anotar.

Luqueño se mostraba impotente en ataque, el público comenzaba a ponerse impaciente y el tanto que daría la posibilidad de llegar al empate en la serie no llegaba.

El esfuerzo del Sportivo no alcanzó. Fue victoria por 2-0 que no fue suficiente para dar vuelta la serie y Luqueño se despidió Copa Sudamericana en la segunda fase.