El equipo trinidense (Santo Domingo es de Trinidad, Asunción) incluyó a tres brasileños con documentaciones de futbolistas paraguayos en un partido de la instancia clasificatoria de la Copa Paraguay, que lo ganó por 2-1 a Humaitá, que protestó y se le adjudicó los puntos.
El tribunal disciplinario de la Asociación Paraguaya de Fútbol excluyó de la competencia al “12”, sancionó al presidente Ramón Amarilla y al secretario Víctor Báez por dos años (prohibición de ejercer cargos dirigenciales e ingreso a espectáculos de la APF), además de aplicar una suspensión provisoria de 30 días al técnico Ariel Castillo y a los atletas Wesley Ramos, Matheus Oliveira y Julio Santos mientras se sustancie la investigación.
Con la suspensión de Báez, el vicepresidente Arturo Lombardo queda a cargo de la Divisional de la cuarta y última categoría de nuestro balompié.
