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El delantero comenzó siendo consultado acerca de su gol tras una estupenda habilitación de Tabaré Viudez. “Habíamos hecho el contacto visual clave para poder encontrarse rápido, aparte sé cómo juega y vi que el central no me seguía de cerca. Se dio en el momento justo porque no veníamos generando situaciones de peligro”, relató.
Preguntado si subestimaron al rival, Santa Cruz se adhirió a lo dicho por su compañero Jorge Ortega y aseguró que no. “Arrancamos bien marcando el primero, pudimos poner el 2-0 con un cabezazo de Brian Montenegro y quizás con ese resultado ya se iba encaminando. Hay mérito de ellos por darnos vuelta el 1-0 pero nunca nos relajamos, no pensábamos que iba a ser sencillo, sabíamos que todos entran a desvivirse con nosotros y Santaní lo hizo”.
En cuanto a si el público del Rey de Copas se volvió más exigente a lo que solía ser en sus primeros años en el club, el goleador respondió que siempre lo fue. “Uno se acostumbra a ganar y ganar y muchas veces el hincha vive tan intensamente el partido que se olvida de lo que hicimos, y no solo los dos campeonatos que conseguimos sino las rachas de triunfos”.
“Olimpia es un examen constante, hay que rendir partido a partido, tenemos que seguir haciendo lo que hacemos más allá del cuchicheo de las gradas. Por momentos se siente que la gente no tiene la paciencia que hay que tener para iniciar el juego con el arquero, salir jugando desde el fondo, pero no tenemos que dejar que nos hagan cambiar nuestra forma de juego”, apuntó Santa Cruz.