Un ciclón aurinegro

La goleada no tuvo cuestionamientos, incluso el resultado pudo haber sido mucho más abultado de no ser por algunas intervenciones de Diego Barreto o malas decisiones de los atacantes aurinegros.

Guaraní entró a atropellar al rival desde el primer minuto y el segundo ya tuvo su recompensa. Ante la gran pasividad del mediocampo azulgrana, Darío Ocampo eludió a dos rivales y en la cabecera del área grande, remató con gran precisión y la pelota se clavó al palo derecho de Diego Barreto, quien intentó seguir el balón, pero ya fue tarde.

Una gran virtud del aborigen fue derribar al rival en los momentos justos. A los 35' cuando parecía que el Ciclón podía reaccionar, Eduardo Filippini, recién ingresado, se proyectó como un puntero derecho y tras una gran cesión de Fernando Fernández, definió con un derechazo cruzado, imposible de detener para Barreto. El lateral aurinegro no tuvo ni sombra en el momento de rematar.

El equipo de Jubero se mostraba insaciable y no se conformó con el 2-0. Antes del cierre del primer tiempo, tuvo la chance aumentar desde los doce pasos, pero Diego Barreto adivinó muy bien el tiro penal de Federico Santander, quien estuvo intratabale y solamente le faltó festejar un gol propio.

Como la visita pudo aumentar el marcador, Cerro tuvo para achicar el marcador en la última jugada del primer tiempo, pero Joel Silva, de impecable trabajo, le atoró el grito a Rodolfo Gamarra.

En la complementaria, nuevamente cuando el azulgrana quiso reaccionar, Guaraní destrozó sus planes de remontar y a los 62', el gran goleador Fernando Fernández, prácticamente sentenció el juego con una gran definición, luego de una habilitación magistral de Marcelo Palau.

Francisco Arce, entrenador azulgrana probó algunas variantes, movió de posición inentendiblemente a varios hombres y Cerro se desequilibró aún más. Para coronar una tarde-noche perfecta en Barrio Obrero, a 9' del final, Juan Aguilar, un guerrero silencioso del aborigen, clavó un exquisito tiro libre al ángulo derecho de Barreto.

Dos minutos después, solamente para las estadísiticas, Rodolfo Gamarra aprovechó una mala salida de Luis Cabral y con arco desprotegido, ya que Joel Silva había salido a jugar con los pies, puso el 4-1 final.

Aunque ya era una paliza, en los últimos instantes, el “Indio” pudo agrandar el resultado, pero Federico Santander no estuvo fino en la noche en el que el aurinegro se convirtió en ciclón.

Con el resultado, Guaraní suma 13 puntos y se aleja aún más en la cima del torneo. Por su parte Cerro quedó estancado con 7 unidades y muy lejos en la tabla acumulativa, que también comanda el aurinegro.