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Bochornosa previa del clásico uruguayo. El fútbol sigue con violentos en sus gradas y otra vez, en Uruguay, se vivió un momento de terror entre barras y la policía. Antes del partido Nacional-Peñarol en el Centenario, los hinchas del carbonero se enfrentaron a la seguridad en las afueras del estadio. Adentro, saquearon los puestos de comida y mientras la policía se ubicaba frente al portón del ingreso a la popular, un barra lanzó una garrafa de 13 kg desde la gradería.
Ese mismo objeto cayó sobre el hombro de un policía y luego sobre un perro que formaba parte del plantel que trabajó en el operativo, sin llegar a fracturarlo. Debido a estos incidentes, 171 personas fueron detenidas, y se aguarda el veredicto de la Justicia, confirmó a EFE el portavoz de la Unidad de Comunicación del Ministerio del Interior, Fernando Gil.
El partido, tras los disturbios, fue suspendido, y dependerá de la Asociación Uruguaya de Fútbol su reprogramación, pero ya sería a puertas cerradas.