“El sueño de muchos de nuestros deportistas ha sido destruido por la conducta inapropiada de determinados atletas, entrenadores y especialistas”, afirma una declaración del Ministerio de Deportes de Rusia, Vitali Mutkó, tras conocer la decisión de la IAAF.
“Los resultados de la votación de los miembros del Consejo de la IAAF han creado una situación sin precedentes: los atletas rusos no podrán participar en los Juegos Olímpicos 2016 en Rio”, indicó el ministro en un comunicado, mostrándose “muy decepcionado” por esta decisión de la IAAF.
“La parte rusa hizo todo lo posible para restablecer la confianza de la comunidad deportiva internacional hacia nuestros deportistas. El ejemplo más convincente es que los rusos son controlados por la Agencia Antidopaje británica (UKADA)”, señala la nota.
Mutkó “declara responsablemente que se cumplieron todas las condiciones de la IAAF para el restablecimiento de los derechos de nuestros deportistas”, agrega la nota difundida por la web de la cartera.
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Las autoridades deportivas rusas instaron al Comité Olímpico Internacional a “volver a evaluar el precedente creado, es decir, la prohibición de participar en los Juegos a una selección nacional de una modalidad deportiva”.
En una carta abierta remitida hace dos días al presidente de la IAAF, Sebastian Coe, el ministro de Deportes ruso, aseguró que la FAR ha cumplido con todas las exigencias para que se levantara la sanción.
“Hemos hecho todo lo que hemos podido. Nos pusieron 100 criterios y creo que hemos cumplido con todos. Creo que tenemos que pasar al ámbito jurídico. En el plano deportivo, público y social nos cuesta. No descarto que pronto pasemos” a tomar medidas jurídicas, dijo Mutkó a los medios.
Con esta decisión, un gigante del atletismo, segunda nación en ese deporte en los Juegos Olímpicos de Londres, estará ausente en el estadio Olímpico de Rio en agosto. “La suspensión de la Federación rusa de Atletismo (ARAF) es una decisión esperada, podíamos suponerlo. Reaccionaremos”, declaró por su parte el ministro Moutko a la agencia rusa TASS.
“Puedo confirmarlo, la suspensión se mantiene”, había declarado antes el secretario general de la ARAF, Mikhail Boutov, desvelando la decisión de la IAAF, cuyo consejo se reunió este viernes en Viena para decidir la suerte de los atletas rusos suspendidos desde hace meses de las competiciones internacionales.
La doble campeona olímpica de salto con pértiga, Yelena Isinbayeva, privada junto con el resto de atletas rusos de los Juegos Olímpicos de Rio por la Federación Internacional de Atletismo (IAAF), denunciará ante los tribunales, anunció este viernes a la agencia rusa de prensa TASS.
“Es una violación de los derechos humanos. No puedo quedar callada, voy a tomar medidas. Me dirigiré a un tribunal de derechos humanos”, avisó Isinbayeva, sin precisar en manos de qué instancia jurídica dejará el asunto.
El presidente ruso Vladimir Putin descartó este viernes las acusaciones, insistiendo en que Rusia no tiene un programa “de dopaje organizado por el estado”.
Una comisión independiente de la AMA confirmó que Rusia no cumplía con los protocolos establecidos por el Código mundial Antidopaje y que el gobierno de Moscú es participe de una trama de corrupción y de encubrimiento para que atletas de elite rusos utilicen sustancias prohibidas en competencias internacionales.
Rusia afirma que ahora cumple con los requisitos para ser readmitida, pero en un nuevo informe, la AMA afirmó el miércoles pasado que los encargados de los análisis afrontan continuos obstáculos tanto por parte de los atletas como de los servicios de seguridad rusos.
Más concretamente, la AMA afirma que los responsables de hacer los análisis han llegado a ser intimidados o que los paquetes que contienen las muestras se han llegado a abrir en las aduanas.
La agencia enumera una serie de obstáculos que afrontan a la hora de hacer las pruebas, como la dificultad de localizar a los deportistas, cuyas direcciones se encuentran a veces en ciudades militares en las que se necesita un permiso especial para acceder.
