Ese último lanzamiento desplazó del oro al polaco Piotr Malachowski (67,55), campeón del mundo en Pekín, que ya acariciaba la gloria olímpica y se tuvo que conformar con la plata. Fue una buena jornada para Alemania, ya que Daniel Jasinski (67,95) se hizo con el bronce. Harting, de 26 años, sucede como campeón olímpico a su hermano Robert (31), eliminado en las calificaciones.
Triple campeón del mundo de la disciplina (2009, 2011, 2013) , Robert Harting, que vuelve a competir en alto nivel después de dos años de lesiones, había terminado decimoquinto en las eliminatorias. El mayor de los Harting había tenido un lumbago el miércoles al intentar apagar la luz con la pierna desde su cama y eso le impidió realizar una buena actuación en las calificaciones.
Pero Robert Harting se puede consolar con la victoria de su hermano pequeño, Cristoph, que logra su primer gran título internacional, de forma sorprendente, después de tener como mejor tarjeta de presentación un octavo puesto en el Mundial de Pekín-2015.
La familia Harting es originaria del Brandeburgo y, en tiempos de la RDA, Gerd (el padre) y Bettina (la madre) eran lanzadores, respectivamente de disco y bala. Los dos gigantes de un club berlinés (Christoph mide 2,07 metros, frente a “solo” 2,01 de su hermano mayor Robert), han tenido una buena escuela.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
“Yo no soy un vendedor. Me gusta estar en un estadio y es mi escenario. No busco la notoriedad ni la publicidad, se la dejo a los otros”, señaló el pelirrojo vencedor. Christoph Harting, que tras cinco lanzamientos no estaba ni siquiera en lugares de podio, logró la hazaña en el último. “Tienes momentos en la vida en que estás concentrado completamente”, dijo Harting sobre su lanzamiento ganador. “Me dije a mí mismo que nadie me podía quitar la victoria”, indicó.
La deportividad reinó entre los lanzadores, con abrazos y felicitaciones entre los tres primeros.