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El tribunal ordenó también investigar a otros dos médicos y a una ecografista.Larramendia Gavilán realizaba el primer año de residencia en el Instituto de Previsión Social (IPS) cuando en la madrugada del 3 de febrero de 2008, a las 4:00 de la mañana, se presentó en el nosocomio Kristhel Gisselle Molinas, con un embarazo de 9 meses.
Como a Molinas le faltaba un mes para tener derecho a la internación en el IPS, no fue atendida y fue abandonada por tres horas, tras lo cual falleció el nonato.
Según la ficha de la paciente, la parturienta ya había ingresado al IPS el 11 de enero de 2008 y salió cuatro días después, con la advertencia de que "tendría que volver ante cualquier eventualidad", porque podría tener un parto prematuro.
Larramendia no realizó lo básico como controlarle los latidos del corazón a la futura madre y al feto, como tampoco le tomó la presión. "Hubo atención negligente, porque era una criatura sana, normal", argumentó Sandra Farías, presidenta del tribunal colegiado.
Farías agregó: "Enterado el médico de guardia Carlos Alberto Wasmosy, no se animó a levantarse de su camita para ver lo que ocurría. Hasta a los animales cuando están pariendo se les mira", dijo indignada la magistrada.
Farías ordenó a la fiscalía que la médica residente Ana María Rodas sea investigada por su conducta negligente, al igual que Wasmosy. Igual disposición afecta a la ecografista Arminda Servián, porque recién realizó su trabajo después de dos horas de fallecer la criatura.
La fiscala Teresa Ruiz Díaz solicitó 3 años y medio de prisión, pero dijo estar conforme con el fallo.
La defensa adelantó que apelará la condena porque la calificación de homicidio culposo no corresponde.
Larramendia solo irá a prisión si la condena queda firme. Deberá ofrecer fianza por G. 50 millones.
Wilfrido Peralta y Blas Cabriza fueron los demás integrantes del tribunal.
Como a Molinas le faltaba un mes para tener derecho a la internación en el IPS, no fue atendida y fue abandonada por tres horas, tras lo cual falleció el nonato.
Según la ficha de la paciente, la parturienta ya había ingresado al IPS el 11 de enero de 2008 y salió cuatro días después, con la advertencia de que "tendría que volver ante cualquier eventualidad", porque podría tener un parto prematuro.
Larramendia no realizó lo básico como controlarle los latidos del corazón a la futura madre y al feto, como tampoco le tomó la presión. "Hubo atención negligente, porque era una criatura sana, normal", argumentó Sandra Farías, presidenta del tribunal colegiado.
Farías agregó: "Enterado el médico de guardia Carlos Alberto Wasmosy, no se animó a levantarse de su camita para ver lo que ocurría. Hasta a los animales cuando están pariendo se les mira", dijo indignada la magistrada.
Farías ordenó a la fiscalía que la médica residente Ana María Rodas sea investigada por su conducta negligente, al igual que Wasmosy. Igual disposición afecta a la ecografista Arminda Servián, porque recién realizó su trabajo después de dos horas de fallecer la criatura.
La fiscala Teresa Ruiz Díaz solicitó 3 años y medio de prisión, pero dijo estar conforme con el fallo.
La defensa adelantó que apelará la condena porque la calificación de homicidio culposo no corresponde.
Larramendia solo irá a prisión si la condena queda firme. Deberá ofrecer fianza por G. 50 millones.
Wilfrido Peralta y Blas Cabriza fueron los demás integrantes del tribunal.