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Goethe (1749-1832) Poeta y dramaturgo alemán.
“Un loco enamorado sería capaz de hacer fuegos artificiales con el sol, la luna y las estrellas para recuperar a su amada”.
Antonio Gala (1930) Dramaturgo, poeta y novelista español.
“Esta sociedad nos da facilidades para hacer el amor, pero no para enamorarnos”.
Zsa Zsa Gabor (1917) Actriz de origen húngaro.
“Un hombre enamorado está incompleto hasta que está casado; entonces está acabado”.
José Ortega y Gasset (1883-1955) Filósofo y ensayista español.
“Hay quien ha venido al mundo para enamorarse de una sola mujer y, consecuentemente, no es probable que tropiece con ella”.
Almanzor, el azote de las mujeres
Abu Amir Muhammad Ibn Abi Amir al-Maafirí (939-1002, llamado al-Manu-r, “el Victorioso”), más conocido como Almanzor, fue un militar y político andalusí, considerado uno de los últimos caudillos del Califato de Córdoba y hayib o chambelán del califa Hisham II.
Pero el terrible Almanzor, azote de Dios, además de sus dotes como militar y caudillo, se valió de su encanto con las mujeres para encumbrarse en el poder. A la muerte del califa Al-Hakam II, Almanzor se acercó a la influyente viuda Subh –mujer poderosa y madre de otro califa, Hisham II– y se apoderó no solo de su corazón, sino también de sus caudales. Se convirtió en su amante y en un hombre muy poderoso. Pronto fue nombrado tutor del califa niño, al que sustituyó en todo.
Si bien Almanzor continuó la relación con Subh, esto no le impidió tener el amor o la amistad de otras mujeres, manipulándolas si le eran útiles. Así, en el camino de su ambición, comprendió que le era ventajoso tener concubinas y esposas cristianas en su harén y, a cambio de evitar sus ataques y tener paz en el reino, muchos se las entregaban.
Mientras se dedicaba a sus útiles escarceos, mantuvo al verdadero califa Hisham II aislado del poder que él ejercía con decisión y crueldad. Lideró más de 90 aceifas contra los cristianos e hizo esclavos a los supervivientes. Ejerció hasta su muerte su pasión por el poder absoluto, gracias a la protección de la mujer más poderosa de su siglo: la gran Subh. (*)
(*) Fuentes:
Recopilación: mpalacios@abc.com.py