CITAS & HECHOS

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Tennessee Williams (1911-1983) Dramaturgo estadounidense.

“Debemos desconfiar unos de otros. Es nuestra única defensa contra la traición”.

François de La Rochefoucauld (1613-1680) Escritor francés.

“Es más vergonzoso desconfiar de los amigos que ser engañado por ellos”.

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George Eliot (1819-1880) Seudónimo de Mary Anne Evans. Novelista británica.

“¿Qué soledad es más solitaria que la desconfianza?”.

Indira Gandhi (1917-1984) Estadista y política hindú.

“La desconfianza es una señal de debilidad”.

La rosa de Talleyrand

Charles Maurice de Talleyrand-Périgord (París, 1754-1838). Cursó estudios de Teología en el seminario de San Sulpicio y, en 1770, fue ordenado sacerdote. Fue abad de Saint Denis y agente general del clero de Francia en 1780. En 1789 fue nombrado obispo de Autun, cargo que dejaría dos años después, tras suscribir la nueva Constitución Civil del Clero redactada por la Asamblea Nacional Constituyente, por lo que fue excomulgado. Fue ministro de Asuntos Exteriores de Napoleón Bonaparte desde 1799 hasta 1807, año en que dimitió por su oposición a las guerras contra Austria, Prusia y Rusia.

Cuando Talleyrand se casó con Catherine Grand no se lo comunicó al emperador. Este, que se preocupaba mucho por las cualidades y defectos de las personas que tenía a su lado, le preguntó a su ministro si su mujer era inteligente.

–Como una rosa, señor –dijo el ministro.

Por la respuesta se adivina que la futura princesa de Benevento no era ninguna lumbrera. Lo demostró durante una cena que Talleyrand ofreció en su casa al embajador de Gran Bretaña, sir George Robinson. Temiendo que su esposa dijera alguna inconveniencia, el marido le hizo una serie de recomendaciones. Ella afirmó que conocía perfectamente al personaje. Mientras cenaban, la señora Grand, que tenía a Robinson a su lado, le preguntó:

–Y, dígame, ¿sigue usted teniendo a su servicio al salvaje Viernes que se encontró en aquella remota y solitaria isla? Al habilísimo diplomático le dio casi un soponcio al ver que su mujer había confundido a sir Robinson con Robinson Crusoe. (*)

(*) Fuentes: Carandell, Luis. Las anécdotas de la política.

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