En lo secreto

“Si uno analiza, las peores decisiones o las cosas que hicimos fueron de manera impulsiva, no porque las meditamos antes”, comenta Adolfo Agüero Esgaib, autor de En lo secreto, una obra que propone 52 consejos para motivar o reflexionar, en la cual insta a que el lector reflexione sobre su vida, en cada momento, a solas y en secreto. Agüero es pastor, conferencista, figura de los medios y empresario. Es cofundador y pastor de la iglesia Más que Vencedores. Este es su segundo libro. Está casado con la cantante de góspel Laura Rojas y tienen dos hijos, Mateo y Andrés, a quien dedicó esta obra. 

En lo secreto, reflexiones para grandes resultados se agotó el día que se lanzó en Amazon y se sigue vendiendo. La editorial en EE. UU. la está reimprimiendo. A mediados de octubre participó de la feria del libro de México y en diciembre se presenta en Nueva York. “Es una bendición. Estamos muy felices. Se está vendiendo muy bien. Acá en el Paraguay ya se agotó varias veces en menos de un mes de su lanzamiento y eso es muy bueno”, confiesa.

¿Y por qué en lo secreto?, inquirimos. “Como se sabe, soy una persona creyente y en la Biblia dice que tenemos que buscar a Dios en lo secreto, porque Él ahí nos habla. Escribí callado en casa sobre lo que en esa semana medité; por ejemplo, la gratitud o sobre la importancia de perdonar, de no perder la esperanza”, responde, y agrega que la obra habla sobre valores y principios que nos hacen mejores seres humanos. “Esos valores que nos hicieron ser lo que somos, pero que los estamos abandonando y somos lo que no queremos ser”. 

Resalta que empezar a pensar sobre eso y aplicarlo va a ser fundamental. “Debemos volver a esos valores y principios lindos que, debido a nuestra vida vertiginosa, uno deja pasar, se olvida, y también deja de lado a Dios. Entonces, podemos analizar nuestras vidas, qué hacer; parar la pelota, como se dice, y analizar la próxima jugada. Meditar”. 

Enfatiza que el mundo está acelerado, como loco. Todo se tiene al instante, como las noticias de todo el mundo, inmediatamente, en el celular. “Hay control remoto para todo. No nos paramos a pensar en lo que realmente importa. Nos ocupamos de lo importante, pero nos olvidamos de lo verdaderamente importante”, resalta. Para Agüero, hay tres niveles: lo urgente, lo importante y lo verdaderamente importante. “Hay veces que hacemos las dos primeras cosas, pero no la tercera, que es la que realmente cuenta”, insiste. 

Destaca que, por ejemplo, el trabajo es importante, pero negociarlo por la familia está mal, porque al dejar lo verdaderamente importante no se puede volver atrás. “Tenemos que vivir y aprovechar la vida. Justamente con este libro quiero hacer 52 reflexiones, para que se lea una por semana. Somos un país con 92 % de creyentes, pero vivimos desesperados, tristes, angustiados por miedo al futuro, con culpa del pasado, con falta de perdón. Eso no puede ser. Tenemos que aprender a vivir los valores y principios si es que somos lo que decimos ser: un país que cree en Dios”. 

Según el autor, si reflexionamos y aplicamos esos grandes valores de vida, de seguro vamos a obtener grandes resultados. “Por ejemplo, hablemos del perdón. A veces estamos peleados con gente que amamos por pequeñeces y por meses o años no nos tratamos con ellos; de repente, reflexionamos y decimos: ‘Voy a pedir perdón’, y eso empieza a tener un resultado positivo, a restaurar relaciones, unir familias”.

Asegura que si empezamos a reflexionar, obtendremos grandes resultados. La mayoría de las veces no lo logramos porque lo hacemos de manera impulsiva, sin meditar en las consecuencias o los resultados positivos que puede tener. Para Agüero, la ingratitud es la hija del orgullo y la humildad abre puertas. Si uno es ingrato ante un favor, cierra puertas. La gratitud mantiene las puertas abiertas. “Además, qué lindo es ser grato, reconocer que alguien hizo algo por vos y decirlo porque le hacés sentir también a la persona valorada. Al agradecido le hace sentir que vale la pena lo que está haciendo. A veces, perdemos oportunidades para ser una bendición para otras personas”. 

La redacción de la obra le llevó cuatro meses, pero un año de edición. “Ese proceso llevó un año y fue con una nueva editorial de Miami, la Whitaker House. Mi primer libro fue con otra editorial. La actual es mucho más grande. El lanzamiento fue en julio por Amazon. La presentación en Miami fue en agosto a nivel internacional y en nuestro país, a principios de octubre”, cuenta. 

Califica su libro más de inspiración que de autoayuda. “Es inspiracional, reflexivo. Considero que la persona con identidad no necesita motivación. Una persona que sabe quién es no necesita que se le motive, sino que se le inspire, a que sea lo que tiene que ser y serlo bien”. Resalta que la lectura del libro ayuda a parar un poco y reflexionar, meditar sobre nuestros caminos y empezar a tomar decisiones más sabias a la luz de la palabra de Dios. 

Revela que cuenta muchas anécdotas, historias de personas que pasaron, tal vez, por lo que uno está pasando en este momento y salieron airosas, y, de repente, les inspira a sobrellevar esa situación. “A veces, no se sabe por dónde empezar o cómo seguir, y esta obra sirve de guía. Incluso hay preguntas al final de cada capítulo”, refiere y agrega que espera que no sirva solo de lectura, sino también para la acción. “Cada capítulo te lleva a la práctica de cada reflexión que aprendiste. Son 52 capítulos por las semanas del año, pero si uno quiere leerlos todos los días y en un día, también es válido”.

mpalacios@abc.com.py

Fotos: ABC Color/Claudio Ocampo.