Juan Pablo II, beato

El deseo de millones de católicos se cumple con la beatificación de Juan Pablo II, el papa que "nos devolvió la fuerza de creer en Cristo", como recordó su sucesor, Benedicto XVI.

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Por Juan A Medina - EFE Reportajes

"Con Nuestra Autoridad Apostólica concedemos que el venerable siervo de Dios Juan Pablo II, papa, de ahora en adelante sea llamado beato". La fórmula de beatificación pronunciada por Benedicto XVI y el descubrimiento de una gran fotografía de Karol Wojtyla que colgaba en la fachada principal de la basílica de San Pedro de Roma avivaron el entusiasmo de los más de un millón de personas, según cálculos de la Policía romana, que siguieron la celebración de beatificación del papa polaco.

Una multitud de feligreses llegados desde todas las partes del mundo estalló en un emotivo aplauso que duró más de ocho minutos en una de las celebraciones más mediáticas que la comunidad católica ha celebrado desde los funerales de Juan Pablo II.

El cardenal vicario de Roma, Agostino Vallini, acompañado del postulador de la causa, el polaco monseñor Slawomir Oder, fueron quienes solicitaron al papa la beatificación de Juan Pablo II (inscribirlo en el libro de los beatos).

Vallini leyó una biografía de Karol Wojtyla (Wadowice 1920-Roma 2005) en la que destacó "las grandes dotes morales y espirituales" de Juan Pablo II y fue relatando pasajes de la vida de este hombre, conocido como el "papa viajero" o "el grande", cuyo pontificado fue el tercero más largo de la historia de la Iglesia (1978-2005).

"Hace seis años estábamos en esta misma plaza para celebrar los funerales de Juan Pablo II", comenzó Benedicto XVI su esperada homilía, atendida en un respetuoso silencio por la multitud congregada entre la que se encontraban delegaciones de 87 países.

Representantes de cinco casas reales, con los príncipes de Asturias al frente de la Casa Real española y 16 jefes de Estado, entre ellos Felipe Calderón, de México, y Porfirio Lobo, de Honduras, además de siete primeros ministros, escucharon las palabras de elogio de Benedicto XVI a su antecesor.

"Aquel día (8 de abril de 2005) ya se percibía el perfume de la santidad", recordó en su homilía el actual papa. "El pueblo de Dios manifestó su veneración hacia él. La causa de su beatificación procedía con razonable aceleración. Y ha llegado pronto, porque así lo ha querido el Señor".

Para Benedicto XVI "Juan Pablo II es beato por su fe, fuerte y generosa". Joseph Ratzinger usó durante la misa en la que proclamó beato a su antecesor el cáliz que utilizó en los últimos años Juan Pablo II y vistió una casulla y una mitra que también perteneció a Karol Wojtyla.

"Con su testimonio", dijo en su homilía Benedicto XVI, Juan Pablo II "ayudó a todos los cristianos del mundo a no tener miedo a llamarse cristiano, de pertenecer a la Iglesia, de hablar del Evangelio". Ayudó, continuó Ratzinger, "a no tener miedo de la verdad. Nos devolvió la fuerza de creer en Cristo".

Benedicto XVI recordó las famosas palabras pronunciadas por Juan Pablo II "no temáis, abrid de par en par las puertas a Cristo", y el mensaje de su antecesor: "el hombre es el camino de la Iglesia y Cristo el camino del hombre".

En la beatificación de Juan Pablo II participaron sor Tobiana, la monja polaca que le cuidó hasta su muerte, y sor Marie Simon Pierre —cuya curación de manera inexplicable para la ciencia de la enfermedad de Parkinson que padecía ha llevado a la beatificación del papa polaco— que llevaron hasta el altar mayor un artístico relicario fabricado para la ocasión con una pequeña ampolla con sangre de Wojtyla.

Tras la misa, el papa y los cardenales presentes en Roma veneraron a Karol Wojtyla delante del altar mayor de la basílica de San Pedro, donde el día anterior fue colocado su féretro tras ser sacado de la tumba. Después fueron miles de fieles quienes pudieron venerar a Juan Pablo II con el que la Iglesia "pasó el umbral del tercer milenio", como recordó Ratzinger.

Rumbo a la canonización

Seis años y un mes después de su muerte, Juan Pablo II sube a los altares, proclamado por su predecesor, y abre un nuevo proceso, el de canonización, su proclamación como santo.

Para el cardenal Angelo Amato, prefecto de la Congregación para la Causa de los Santos, no se pueden hacer previsiones sobre la fecha de una eventual canonización de Juan Pablo II.

"Para la canonización hace falta otro milagro. No se puede hacer una previsión precisa sobre la fecha. Lo único que se puede decir es que, tras la beatificación, la postulación comenzará a recoger las gracias (milagros por intercesión del ya beato) para su eventual valoración", dijo Amato a Radio Vaticano dos días antes de la beatificación de Juan Pablo II.

El camino hacia la santidad tiene tres peldaños: venerable siervo de Dios, beato y santo. Para ser proclamado beato es necesario que la Iglesia católica reconozca oficialmente un milagro por su intercesión, como ya ha ocurrido con Juan Pablo II, y para santo es obligatorio que se reconozca un nuevo milagro a partir de que esa persona sea beatificada, en el caso de Juan Pablo II proclamado por Benedicto XVI el 1 de mayo. 

Hace seis años estábamos en esta misma plaza para celebrar los funerales de Juan Pablo II", comenzó Benedicto XVI su esperada homilía.

El proceso

28 ABRIL 2005

El papa Benedicto XVI recibe al cardenal Camilo Ruini para tratar sobre las extraordinarias circunstancias en el proceso de Juan Pablo II.

13 MAYO 2005

El papa Benedicto XVI da a conocer la dispensa de los cinco años necesaria para iniciar una causa. El papa anuncia que el proceso para la beatificación de Juan Pablo II se iniciará en breve.

18 MAYO 2005

El cardenal Camilo Ruini firma el edicto de la causa de beatificación y canonización y pide testimonios a favor y en contra, así como cualquier escrito inédito de Juan Pablo II.

28 JUNIO 2005

El cardenal vicario de Roma, Camilo Ruini, abre oficialmente el proceso de beatificación de Juan Pablo II en una solemne ceremonia celebrada en la basílica de San Juan de Letrán de Roma.

29 JULIO 2005

Monseñor Slawomir Oder, postulador de la causa de beatificación, celebra una misa ante la tumba de Juan Pablo II por los que están relacionados con la causa de Juan Pablo II.

4 NOVIEMBRE 2005

El Tribunal de Cracovia (Polonia) creado para ayudar en la investigación principal del proceso de beatificación que se sigue en Roma, comienza sus trabajos en la ciudad donde Wojtyla pasó la mayor parte de su vida antes de ser elegido pontífice. Los trabajos consistirán en entrevistas con testigos que conocieron a Juan Pablo II.

30 ENERO 2006

Se hace público el milagro seleccionado para avalar la beatificación. Juan Pablo II, tras su muerte, realizó supuestamente un milagro, que se está verificando, al curar de la enfermedad de Parkinson a una religiosa francesa, según monseñor Slawomir Oder.

2 ABRIL 2007

Se celebra en la catedral de Roma, San Juan de Letrán, la ceremonia que concluye la fase diocesana de la causa de beatificación de Juan Pablo II. A partir de este momento, el proceso pasa a la Congregación para la Causa de los Santos.

19 DICIEMBRE 2007

Benedicto XVI proclama "venerable" a Wojtyla al aprobar el decreto por el que se reconocen sus "virtudes heroicas".

2 ABRIL 2010

Se cumplen cinco años de la muerte de Juan Pablo II.


14 ENERO 2011

Benedicto XVI promulga el decreto por el que se reconoce un milagro por intercesión de Juan Pablo II: la curación, inexplicable para la ciencia, de la religiosa francesa Marie Simon Pierre, que padecía Parkinson.

11 ABRIL 2011

La Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos decide que la festividad litúrgica de Juan Pablo II, una vez sea beatificado, se celebre cada 22 de octubre, aniversario del comienzo de su pontificado, en la Diócesis de Roma y en la de Polonia.

1 MAYO 2011

Benedicto XVI proclama beato a Juan Pablo II.

Hace seis años estábamos en esta misma plaza para celebrar los funerales de Juan Pablo II", comenzó Benedicto XVI su esperada homilía.

Juan Pablo II sube a los altares y abre un nuevo proceso, el de canonización, su proclamación como santo.
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