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El gremio sostiene, además, que la propuesta de profunda modificación del sistema impositivo paraguayo terminará representando una falta total de garantías para las empresas que apuestan por el país.
Refiere que en un momento de desaceleración económica como el actual, el Estado debería ser el principal guardián e impulsor de planes y proyectos que brinden certeza, además de tranquilidad a los agentes económicos; sin embargo, hasta ahora solo se ha limitado a inyectar mayor nerviosismo e incertidumbre en el mercado local.
A criterio de la CNCSP, el Congreso Nacional tiene hoy en sus manos la definición del Proyecto de Reforma Tributaria, que así como están planteadas las modificaciones, el sector no agropecuario cargará con un aumento de la tasa efectiva cercano al 19% y el agropecuario con un incremento del 72%, tal como se observa en el gráfico.
También refiere que las condiciones económicas no están dadas para empujar reformas impositivas como las planteadas, más aún cuando también existen gastos innecesarios que podrían ser fácilmente recortados o eliminados y que redundarían en ahorros importantes para las finanzas públicas.
Reingeniería del gasto
La CNCSP había reclamado igualmente en un anterior pronunciamiento una reingeniería del gasto y puso como ejemplo que si en el Poder Legislativo se aplicaran profundas reformas salariales, se podría ahorrar alrededor de US$ 25 millones de forma anual. Con una profunda reforma, consistente en que los funcionarios de la mencionada entidad perciban un salario y aguinaldo como cualquier empleado privado promedio, el Estado podría ahorrar la cifra citada. “Este monto, permitiría incluso financiar parte de programas de impacto social”, afirma la agrupación empresarial.
A la vez, aseguraba, que arrastraban el temor de que baje el consumo con la reforma del impuesto selectivo al consumo (ISC), ya que a criterio de este gremio afectará a los ciudadanos y reduciría el consumo de la clase media.
Aumentos significativos
Expresó que el proyecto de reforma tributaria presentado semanas atrás al Congreso Nacional contempla aumentos significativos en las tasas de diversos productos que forman parte de la canasta de bienes de la población.
Sostiene que “el Ministerio de Hacienda espera recaudar unos US$ 400 millones adicionales con dicha reforma, aunque siguen existiendo varios gastos superfluos y privilegios en distintos organismos estatales, cuyo ahorro generaría importantes ahorros al Fisco”.
“Los intentos de una modificación impositiva en el país, que daría más recursos a las arcas de aproximadamente US$ 172 millones solo a través del IRACIS e IRAGRO, no se justifican sin una verdadera intención de reformar el gasto público y de reestructurar las instituciones, con especial urgencia”, añade en otra protesta.
Con relación a los gastos públicos, la CNCSP viene advirtiendo desde hace tiempo que el mal uso de los fondos, financiando por ejemplo aumentos salariales sin sustento técnico, entre otros gastos, solo para mantener un esquema de privilegios, principalmente, en el Parlamento, sigue perjudicando sobremanera la credibilidad del Estado.
Apuro para dictaminar a favor de reforma
El viernes último, el cuestionado senador liberal llanista y presidente de la Comisión de Hacienda del Senado, Dionisio Amarilla, hizo firmar el dictamen a favor del proyecto de reforma tributaria, en una reunión que no tenía quorum, según se verificó en la grabación de la reunión. La jugada de Amarilla habría sido para “quedar bien” con los colorados y salvarse así de ser expulsado, tras el reciente escándalo que lo salpica en el supuesto tráfico de influencia a favor de una empresa amiga de seguridad, que pretende quedarse con un jugoso contrato en IPS.
Caída
En un momento de desaceleración como el actual, el Estado debería ser el principal impulsor de proyectos que brinden tranquilidad a agentes económicos.
Alzas
En proyecto de reforma tributaria, el sector no agropecuario cargará con una suba de la tasa efectiva cercana al 19% y el agropecuario, con un incremento del 72%.
Gastos
Las condiciones económicas no están dadas para empujar reformas impositivas como las planteadas, más aún si hay tantos gastos innecesarios