La utilizamos hasta sacarle el máximo partido, amándola incondicionalmente hasta que su mango o correa se suelte, o que el cierre deje de funcionar. Es ahí cuando llega el inevitable momento de cambiarla.
¿Qué cartera me compro?
Siempre a la hora de adquirirla aconsejo que lo ideal es elegir comodidad; luego, seguir los tres pilares de la elegancia: sencillez, naturalidad y discreción. Si te deja con estos enunciados, no dudes; esa es tu cartera y puedes comprarla.
A la hora de optar por una de uso diario debes tener en cuenta que tenga una buena estructura; es decir, que aguante la cantidad de artículos que podrías llevar adentro. En la actualidad está de moda utilizar carteras extragrandes, pero no está de más decir que son muy cómodas, aunque para personas de baja estatura o muy delgadas no son las adecuadas, ya que desproporcionan el cuerpo y llaman más la atención que el atuendo que puedas llevar puesto. Por el contrario, para las mujeres altas, las maxicarteras, como las llaman, les va de maravilla, pero tienes que tener presente una cosa: si estás indecisa a la hora de comprar, las medianas son las correctas.
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También el estilo que tenga la cartera es un plus muy importante a la hora de lucirla; por ello, procura que la forma que tenga no sea muy acentuada y genere mucho volumen, ya que es la mujer la que tiene que lucir y esta no debería ser opacada por la cartera.
¿Qué color me llevo?
Existen carteras de todos los colores y estilos, por eso es importante saber cuál es la que mejor va con tu estilo y día a día. En estos tiempos, en los que la moda es una revolución diaria y la etiqueta está en constante cambio, hay algunas reglas que ya no se siguen como tales. Ya puedes lucir una cartera diferente al color de tus zapatos, toda vez que no sobresalga del estilismo que estás usando. Para el trabajo, lo ideal es utilizar colores neutros, como el clásico negro, marrón o beige. Hoy en día ya no es necesario que combine con todo tu conjunto, pues puede integrarse a tu look divinamente sin seguir las normas habituales y romper la armonía con otro color.
Recuerda: “La simplicidad es la clave de la verdadera elegancia”, Coco Chanel.
Hasta la próxima entrega…