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Aunque sorprendido, se muestra afable y de buen humor al otro lado del teléfono. El célebre escritor y guionista paraguayo Robin Wood dijo este domingo a ABC Color que las versiones de una supuesta enfermedad incurable que lo obligaba a dejar la vida artística lo habían dejado asombrado.
“Son cuentos chinos”, señaló en una conversación telefónica con la redacción digital de nuestro diario. “Yo no sé de donde salió ese disparate”, agregó enseguida. A pesar de la molestia y la sorpresa, no pierda la oportunidad de soltar una risa.
El sábado, la exesposa del guionista, Graciela Stenico, dio a conocer a través de su perfil en la red social Facebook un comunicado en el cual aseguraba que Wood se retiraba de la carrera artística como consecuencia de su delicado estado de salud. “Una mente brillante también tiene su final”, así iniciaba el escrito.
“Cumplo en informar ,que mi esposo Robin Wood, quien ha regalado tanta fantasía, imaginación y alegría a generaciones de personas desde hace ya 51 años, hoy pone punto final a su carrera de escritor al habérsele manifestado un mal neurológico irreversible. Otro fracaso de la ciencia médica que no puede ser controlado y mucho menos curado”, señalaba el comunicado.
Una versión que Mark Wood, hijo del guionista, y el propio artista negaron este domingo.
“Estoy con una salud de hierro, escribiendo día y noche”, afirmó Robin Wood para luego relatar que todavía tiene que viajar a Europa para recibir un premio.
El artista salió además al paso de las versiones de supuesta violencia física que sufre por parte de su hijo, Mark, quien lo acompaña durante su estadía en territorio nacional. “Le acusan de apalearme y él mide dos metros, solo si me escupe en la cabeza podría ser”, dijo en tono sarcástico.
Ya en tono más serio, aseguró que entre sus hijos y él nunca hubo un solo hecho de violencia física. Adelantó además que acompañaría a su hijo al juzgado para brindar declaraciones al respecto de este punto. “Mi hijo es europeo, por lo tanto no está acostumbrado a que lo hagan correr de comisaría en comisaría”, dijo.
En otro momento criticó que le hayan prohibido acompañar a su hijo al juzgado. “Es un chico joven que ha estado fuera del Paraguay por años y que vino para acompañarme ahora. Quieren que vaya al juzgado sin el padre”, aseveró.
“Me están acorralando, realmente quiero cruzar el río a nado. No quiero que lo lastimen al chico. Mi exesposa dijo que no estaba en mis cabales y ahora no me dejan acompañar a mi hijo. Esto es un complot, eso es dictadura. Me quiero robar un bote y me voy al otro lado del río”, sentenció.