La misma, quien a lo largo de todos estos años ayudó a mantener viva la memoria de su padre, junto a su madre Catalina Bogado, estaba afectada por un delicado cuadro de salud.
En 1972, meses antes de la muerte su padre, visitó en Buenos Aires al creador de “India”, (donde vivía exiliado por la dictadura) acompañada de su esposo Víctor Valenzuela y de sus hijos. Tras el fallecimiento del mismo, junto a su hermano Francisco Flores Bogado realizaron diversos esfuerzos para la repatriación de los restos del gran músico, hecho que no fue posible bajo el régimen stronista. Y que se concretaría recién en 1991.
Desde esa fecha también intentó el cobro de los derechos autorales en Autores Paraguayos Asociados, como heredera legal, y enfrentó la reiterada negativa de la entidad autoral para el pago de dicho derecho en todos estos años.
El último aporte destacado de Olga Flores y Catalina Bogado lo constituyeron los testimonios dados para el álbum publicado por el Cabildo: “José Asunción Flores, padre de la Guarania”.
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En agosto pasado, con motivo del Día de la Guarania, fue homenajeada en el acto público en la plaza “Ortíz Guerrero - José Asunción Flores”, por el Ateneo Cultural José Asunción Flores y la Dirección de Cultura de la Municipalidad de Asunción.
Sus restos son velados en la casa de sepelios Futuro, sobre la avenida Aviadores del Chaco 2580 e/ Cañada y San Blas, desde ayer a la siesta, y serán enterrados esta mañana en el Cementerio del Sur, según datos proporcionados por su hijo Jorge Valenzuela Flores.