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SANTIAGO DE CHILE. Braulio Jatar, de 58 años, fue detenido el pasado 3 de septiembre junto a una treintena de personas, un día después de que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, realizara un recorrido en la comunidad popular de Villa Rosa en la oriental Isla de Margarita, estado Nueva Esparta.
Durante esa visita decenas de ciudadanos increparon a Maduro con reclamos, insultos y golpeando ollas en protesta por su presencia. Aunque los familiares de Jatar han sostenido que el periodista no se encontraba en el lugar de la protesta, las autoridades han asegurado que el editor pudo estar involucrado en la organización de la misma.
Fue imputado por presunto lavado de dinero, pero el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP) asegura que en realidad fue arrestado por divulgar videos de una protesta contra Maduro en Margarita (norte) .
Según la familia, las autoridades alegan que portaba una alta suma de dinero en efectivo sin declarar cuando fue interceptado por agentes de inteligencia mientras se trasladaba en su vehículo particular, un día después de haber hecho públicos esos videos.
La esposa de Jatar, Silvia Martínez, informó en diciembre pasado que el periodista fue diagnosticado con cáncer de piel y exigía su inmediata liberación para brindarle tratamiento médico.
El canciller chileno, Heraldo Muñoz, celebró la salida de la cárcel del periodista venezolano-chileno. "Chile ha estado de su lado y defendiendo sus derechos desde el primer momento, así que nos complace mucho por él y por su familia”, agregó Muñoz.
El caso ha ocasionado roces diplomáticos. El gobierno de Chile ha pedido respeto a los derechos humanos del periodista, a lo que Caracas respondió con acusaciones de “injerencismo".