Compatriotas se preparan para el huracán

Las personas se agolpan en masa en supermercados y gasolineras, y apenas se abastecen de sus productos, los mismos se agotan. El agua potable escasea y muchos optan directamente por trasladarse a otras ciudades. Es un resumen del reporte de tres paraguayas residentes en diversos puntos de Miami, Florida, donde para el domingo se prevé llegue el huracán Irma, que ya azota a playas del Caribe.

Según la compatriota Norma Curran, quien vive en Kendall, las colas para cargar gasolina duran horas. “Ayer fui a las 23:00 pero me salí de la cola porque los de adelante mío se empezaron a pelear porque uno se quiso colar. No me pareció seguro estar ahí. La gente está estresada”, señaló como una de las experiencias que tuvo. Dijo que a raíz de las colas, se genera gran caos en el tránsito.

Habló además de la experiencia que tuvo en una sucursal del supermercado Publix. Señaló que apenas reabastecen de mercarderías los estantes, los mismos se vacían ya que hay personas aguardando para ingresar una vez se abre el comercio. "Ellos reciben mercancía durante la noche y rellenan durante toda la noche y abren a las 7:00. Estuve ahí al abrir con otras 100 personas”, indicó.

Explicó que se prepara con alimentos enlatados tanto para consumo humano como para su mascota. “Agua es imposible encontrar, entonces compré recipientes y los cargué de agua de mi jarra con filtro, aunque acá el agua se puede tomar del grifo. Hielo también se acabó entonces llené vasitos y a la congeladora al estilo paraguayo. Tengo platos y cubiertos desechables”, detalló.

Otro aspecto que resaltó es que se hacen muchos asados para deshacerse de la carne congelada. “Los supermercados están abiertos. Todavía no se sabe cuándo van a estar cerrando. Las universidades ya están cerradas. Yo trabajo en la Universidad de Miami y ya cerraron desde hoy”, agregó.

Dijo que en su caso no se trasladará a otra ciudad, pero que ya pronto evacuarán la zona frente al mar, por ejemplo Miami Beach y Key Biscayne.

Sobre este punto, Elda Ortega, quien reside en el barrio Westchester, ubicado al sur de la ciudad, explicó que tampoco abandonará su domicilio porque no se trata de una zona costera, por lo que no están obligados a evacuar.

“La población en general se está preparando. Asegurando sus hogares con puertas y ventanas de metal. Los supermercados están desabastecidos por completo de agua y comidas perecederas. Todo ya se compró”, explicó a este diario.

A su turno, Jimena Ferres, quien vive en Weston, dijo que se trasladará junto su familia a Orlando, donde estarán más seguros.

Comentó que todos los peajes ya están liberados por la evacuación. Coincidió con el testimonio de las demás al decir que la mayoría de las casas ya aseguran puertas y ventanas con persianas de metal y que las colas en las gasolineras no merman.

Según comentó, pudo leer en las noticias que el alcalde de Miami Beach anunció que las evacuaciones para evitar pérdidas de vidas comienzan entre hoy y mañana en las zonas A y B, consideradas las más peligrosas por su cercanías al mar.

El poder destructivo del huracán Irma que azota al Caribe equivale al doble de todas las bombas de la Segunda Guerra Mundial, según una estimación hecha por Kerry Emanuel, un experto en huracanes que trabaja en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT). El fenómeno meteorológico posee unos 7.000 millones de vatios, aproximadamente el doble de la energía de todas las bombas usadas en la Segunda Guerra Mundial.