Brasil: indignación pudo más

Concejales y el prefecto (intendente) de una localidad del interior de Brasil pretendían autoamentarse sus remuneraciones; sin embargo, el clamor de la ciudadanía los obligó a retroceder en la decisión e incluso disminuir sus sueldos.

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San Antonio da Platina es un pequeño municipio de 45.000 habitantes ubicado en la zona norte de Paraná, estado brasileño que es limítrofe con Paraguay. La localidad dista unos 780 kilómetros de Ciudad del Este y está ya en el límite entre los estados de Paraná y Sao Paulo.

Semanas atrás, las autoridades municipales de este pequeño municipio desataron la indignación generalizada de la ciudadanía. Es que los concejales aprobaron un proyecto de ordenanza por el cual aumentaban sus remuneraciones y la del prefecto (intendente). Un caso que quizás a la ciudadanía paraguaya le suene similar.

Fue una empresaria la que fue ante la Junta Municipal para protestar contra el proyecto. La mujer fue filmada y el video fue a parar en Internet y las redes sociales se encargaron de viralizar el enojo que se fue contagiando.

Cuando la Junta Municipal se volvió a reunir, lo hizo con un salón repleto de ciudadanos que reclamaban la revisión de la postura. Los dueños de los locales comerciales cerraron temprano y dieron permiso a sus empleados para que acudieran a la sesión, relata un informe de la Red Globo que recorre entre los usuarios paraguayos de redes sociales días después de que la Cámara de Diputados aprobara una ampliación presupuestaria para permitir que sus funcionarios perciban dos aguinaldos extras.

Ante la presión popular, siete de los nueve concejales presentaron una nueva enmienda en la que en lugar de aumentar sus sueldos, los reducían. El salario del prefecto que de 14.176 reales debería haber pasado a ganar 22.000 con el proyecto inicial, terminó siendo reducido a 12.000 reales; mientras que el sueldo de los concejales que debía pasar de 3.745 reales a 7.500, fue reducido a 970, quedando incluso por debajo del sueldo mínimo legal vigente en el estado de Paraná.

“A partir de ahora, el que quiera ser concejal deberá hacerlo por amor mismo”, señaló Valdir De Souza, titular de la Cámara Municipal.

Otras dos ciudades del mismo estado, Mauá da Serra y Sao Mateus do Sul, siguieron el mismo camino y redujeron también las remuneraciones de las autoridades municipales. Como consecuencia, se ha registrado una reducción de los candidatos que aspiraban a ser reelectos como concejales, relata el portal Rádio Sananduva.

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