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Quince vehículos policiales se estacionaron hoy por la mañana frente a la Superintendencia de la Policía Federal de Curitiba, donde Lula desayunó pan con mantequilla.
El refuerzo de la seguridad ocurrió mientras arribaron cinco autobuses con seguidores de Lula que se sumaron a la “vigilia ” iniciada el sábado para exigir su libertad.
La Justicia prohibió la realización de manifestaciones y campamentos en las proximidades de la Superintendencia ubicada en el barrio Santa Cándida, en el norte de Curitiba, capital del estado de Paraná.
Lula está detenido en el cuarto piso de la unidad policial desde el sábado por la noche y ayer asistió a la transmisión del partido en el que su equipo, Corinthians, se consagró campeón del torneo de fútbol de San Pablo.
Está previsto que este lunes el exgobernante se reúna, como lo hizo ayer, con sus abogados defensores.