“Hace cuatro años que estoy oficialmente al servicio. Me gusta muchísimo lo que hago, ayudar a otras personas es una cuestión que no tiene precio, no tiene costo, yo sé que algunas personas dicen que los bomberos deberían de tener un salario, pero prácticamente casi todos coincidimos que nosotros no queremos un salario. Yo creo que si se tiene un salario se va a perder la esencia de lo que es el voluntario solidario”, afirma.
Mujeres bomberas vamos siendo más
"Al principio cuesta acostumbrarse más bien por algunos obstáculos que se tiene. Generalmente se cree dentro del colectivo imaginario que es un trabajo solo para los hombres o que son los hombres los que generalmente más asistentes a los servicios de voluntario y normalmente no se acostumbra a ver a muchas mujeres como bomberas.
“Al comienzo cuesta un poco adaptarse, por el esfuerzo de los entrenamientos físicos, pero es un trabajo que realmente tanto hombres como mujeres lo pueden hacer. Es tener actitud y disciplina a la cual una se va entrenando y acostumbrando y así realmente cada día más las mujeres nos vamos ganando un espacio más dentro del cuerpo de bomberos”.
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Incendios, inconsciencia de la gente
La joven Milagros Alborno, dice que tanto sus compañeros como ella opinan lo mismo, sienten una rabia e impotencia tan grande ante tanta inconsciencia de algunas personas irresponsables. “Lastimosamente el paraguayo esta tan acostumbrado a quemar su basura, a tirar en las calles resto de cigarrillo y a nosotros nos da mucha pena. El paraguayo no se acostumbra a tirar la basura donde corresponde y simplemente la quema porque dicen que es más fácil”, refiere. “Justamente por culpa de esa gente inconsciente ahora tenemos compañeros que están trabajando prácticamente los 24 horas del día en estas semanas de incendios en varios puntos del país, no descansan e incluso hay algunos que están a punto de perder su trabajo y es una rabia e impotencia que nosotros estamos sintiendo”, agrega.
“La experiencia dolorosa que me llegó profundamente fue el caso de un niño de un año y 8 meses que falleció prácticamente en nuestros brazos por culpa de la inconsciencia de sus padres, el niño estaba enfermo no estaba recibiendo una asistencia médica y prácticamente falleció ahogado en su propio catarro. Nosotros trabajamos muchísimo para que reviviera y no pudimos hacer más nada por él y fue una experiencia muy triste que por culpa de sus padres de no llevarle al médico, de no medicarle haya terminado así realmente” recuerda Milagros.
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