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La práctica se conoce como grooming y se da cuando una persona mayor de edad se hace pasar por un niño con un perfil falso y contacta con menores para ganarse su confianza, con amistad al principio, y posteriormente buscando despertar su instinto sexual manteniendo conversaciones obscenas.
El tema saltó al tapete de la discusión pública luego de que trascendiera el peligro al que estuvo expuesto un niño de 12 años, cuando un desconocido se hizo pasar por una mujer atractiva y lo citó. La madre descubrió el hecho a tiempo y logró salvar al pequeño.
La fiscala de la Unidad de Delitos Informáticos, Irma Llano, explicó que normalmente estos individuos solicitan imágenes de contenido sexual a los menores y luego intentan avanzar a un encuentro en persona, que normalmente deriva en la comisión de otros delitos.
Increíblemente, para nuestra ley el grooming no constituye un delito. No obstante, la agente del Ministerio Público aseveró que el camino es investigar, pues así se podría descubrir la existencia de víctimas anteriores y demostrar que la persona ya ha cometido otros delitos.
“Tuve dos anteriores casos de grooming en nuestro país, donde corroboramos que ya se había cometido pornografía infantil”, detalló la investigadora, quien también brindó una serie de recomendaciones para que los padres mantengan a sus hijos protegidos de los peligros de la red.
- Es importante que pongan el control parental a los celulares y computadoras. Es una herramienta que bloquea páginas para adultos y se adquiere a través de internet.
- Diariamente, habitúese a controlar el historial de búsqueda de sus hijos.
- Cree un usuario que su hijo esté obligado a utilizar exclusivamente en la computadora familiar, para verificar constantemente a qué sitios ingresa.
- El diálogo es fundamental. Háblele a sus hijos de los peligros que enfrentan en las redes sociales.
De acuerdo a datos brindados por Irma Llano, desde el 2014 hasta la fecha se han recibido más de 2.000 reportes de pornografía infantil.
La fiscala insta a los menores que han recibido hostigamiento en las redes sociales a denunciar el hecho ante la Fiscalía de Delitos Informáticos, ubicada en las calles Humaitá casi Colón.