La idea de que Aduanas vuelva a depender de Hacienda surgió la semana pasada luego del cruce de declaraciones que tuvo el ministro Santiago Peña con el director de Aduanas, Nelson Valiente, por la disminución de la recaudación que registra la entidad. Santiago Peña se mostró a favor de que la Dirección Nacional de Aduanas (DNA) vuelva a depender de la cartera fiscal, porque la separación -a su criterio- generó algunos problemas.
Consultada al respecto, Margarita Díaz de Vivar, directora de la DNA durante el gobierno de Nicanor Duarte Frutos, afirmó que cuánto menos instituciones ajenas a la Aduanas se involucren, es mejor para el país. “Cada uno realiza bien lo que sabe hacer, todo lo que tiene que ver con la Aduanas debe ser manejado por la gente que conoce las cosas y es capaz de manejar los mecanismos; si eso pasa todo va a mejorar”, declaró.
“El Código Aduanero dice que es un organismo autónomo y debe ser respetado, pero si los reglamentos se violan hasta por las máximas autoridades, cómo podemos exigir a los funcionarios que los sigan y hagan bien su trabajo”, expresó Díaz de Vivar
Con respecto a la corrupción que mancha a la institución, dijo que no todos los funcionarios deben ser señalados, por más que efectivamente sí existen algunos que son culpables de contrabando y otros hechos ilegales. La extitular señaló también que no se debe controlar al empleado sino a la mercadería, desde su punto de partida y trayecto, hasta su ingreso al país; además del funcionamiento de la institución en sí.
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Aduanas era hasta el año 2004 una dirección general del Ministerio de Hacienda, pero en 2005, durante el gobierno de Nicanor Duarte Frutos, se convirtió en la Dirección Nacional de Aduanas, de carácter autónomo.