El violento ex defensor azulgrana, actualmente detenido en el Departamento de Seguridad de Eventos Especiales y Deportivos de la Policía Nacional, fue imputado ayer por tres delitos: perturbación de la paz pública, amenaza de hecho punible y violación a la Ley de Armas.
Pese a sus antecedentes violentos, fue beneficiado con el arresto domiciliario y se le impuso una fianza personal de G. 50 millones, además la prohibición de portar armas y de salir del país mientras dure el proceso, informó Perla Silguero, periodista de ABC Color.
El episodio por el cual se le atribuyen los delitos se registró el 5 de mayo pasado y hace pocos días la Policía lo identificó gracias a las imágenes de cámaras de seguridad. Aproximadamente a las 21:40 de aquella fecha, un grupo de simpatizantes del Olimpia pasaba frente a la casa de Báez, situada en barrio Obrero de la capital, donde fueron atacados por éste y otras cinco personas, una de ellas con escopeta.
Las imágenes revelan que Carlos Báez portaba una escopeta con la que efectuó varios disparos contra los simpatizantes del acérrimo rival. Tras esto, las víctimas huyeron del lugar y realizaron la denuncia ante la Policía.
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El historial de “Aquiles” Báez es más nutrido desde el punto de vista delictivo que deportivo. El 28 de junio de 2013, agredió a un aficionado en el estadio del club Nacional, lo que motivó su imputación por violencia en los estadios y perturbación de la paz pública, pero pese a que la Fiscalía solicitó su remisión a la Penitenciaría de Tacumbú, el Juzgado lo benefició con medidas alternativas a la prisión.
Un año después fue imputado por el hecho punible de incitación a cometer hecho punible, luego de ser identificado como el responsable de hacer declaraciones amenazantes y ofensivas mediante mensajes de voz a través de WhatsApp contra un hincha del Olimpia.
“Bueno muchachos quiero saber cuándo vamos a ir a matar olimperos ahí en (Coronel) Oviedo, estoy podrido de todos esos olimpistas, tengo ganas de reventarle a todos, uno por uno le voy a reventar ahí y como cantan en su musiquita jare (sic). Si quieren mano a mano, mano a mano le voy a dar a todito, puerco de mierda; soy Aquiles, por las dudas”, expresaba en el audio.
El 1 de marzo de 2015, Báez nuevamente se hacía público, esta vez por apedrear un colectivo con hinchas de Olimpia, lo que le valió otra imputación por perturbación de la paz pública, caso que no llegó a juicio oral y público, pues solamente se le volvió a prohibir la entrada a los estadios cuando juegue Cerro Porteño por dos años, debiendo pasar el tiempo de los juegos en una comisaría.