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A medida que avanzan los trabajos de limpieza hacia las zonas más bajas del barrio Ñu Pora, a cargo de operarios del Ministerio de Obras Públicas, la cantidad de basura con que se encuentran es desesperante. Hay de todo, botellas de vidrio, plásticos, latas, ramas, cubiertas y basura domiciliaria en general.
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La tarea de limpieza que se inició en la zona de la planta de tratamiento de la Essap, ya va llegando hasta el sitio conocido como “Cañada”, tramo que desemboca en el puente Paso Sana, y que totaliza 7,5 kilómetros. Según la oficina de prensa de la comuna, de allí los trabajos continuarían aguas abajo hasta la desembocadura al arroyo Jukyry.
Los trabajos consisten en la recanalización del arroyo, extrayendo la basura y sedimentos, a fin de volver a abrir el abrir el cauce natural. La tarea se vuelve dificultosa debido a la cantidad de basura que se encuentra obstaculizando el cauce natural, que además de generar inundaciones es foco de enfermedades infecciosas.
La tarea se lleva a cabo luego de casi dos años de que vecinos vienen reclamando la tarea, ya que a causa de la colmatación, decenas de vecinos venían padeciendo de inundaciones. El intendente Alcibiades Quiñonez (ANR) dijo que en breve van a articular un proyecto para ir creando conciencia en los ciudadanos y que la basura vaya a parar a donde corresponde y no a las calles ni al arroyo.