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Después de varios intentos de tratamiento, finalmente en la primera sesión del periodo ordinario, dieron media sanción al régimen de indemnización para los exsoldados combatientes del 2 y 3 de febrero de 1989, que puso fin a la dictadura de Alfredo Stroessner.
La diputada del Pilar Medina (ANR, cartista) intentó postergar el estudio por un mes alegando que existían dos listados de beneficiarios que se encontraban en plena etapa de depuración. Sus colegas salieron al paso señalando que a ellos no les correspondía analizar el listado.
El régimen se establece de la siguiente forma: Los herederos de gestores combatientes que perdieron la vida durante los combates desarrollados el 2 y 3 de febrero serán indemnizados con 3.000 jornales mínimos, equivalente a G. 235.515.000.
Mientras que para el caso de gestores que participaron directamente en los combates percibirán una indemnización de 2.000 jornales mínimos, equivalente a G. 157.701.000.
El mismo monto percibirán las viudas o parientes de primer grado de consanguineidad de gestores que hayan fallecido después del conflicto bélico.