La denuncia, con las documentaciones respaldatorias, fue acercada a este diario por el voluntario Gustavo Céspedes, quien con 32 años de servicio fue expulsado del CBVP.
Así como él, fueron expulsados otros nueve combatientes más, entre los que se encuentran el capitán mayor Emigdio Benítez, el capitán mayor César Manuel Manchini Céspedes, el voluntario Carlos Daniel Lezcano Torres, el capitán mayor Cristhian Fernando Tabares Ocampos. Otros, que fueron expulsados con posibilidad de regresar a las filas en dos años son Diego Arnaldo Vivero Irazusta, Guido Marcelo López Rodríguez, el capitán Jimmy Enhart, el teniente Rodrigo David Rojas y el voluntario José Virgilio Rivas Mendoza.
El denunciante contó que son tres las principales irregularidades que encontró en el proceso interno de sumario que realizan los bomberos en contra de alrededor de 40 voluntarios, de los cuales 10 ya finalizaron con la expulsión, y corresponden a las “cabezas visibles”, de los voluntarios que piden la renuncia del directorio, debido a los hechos de corrupción que salieron a la luz el año pasado.
La postura de estos bomberos era exigir tajantemente la renuncia de las autoridades, por lo que marcharon hasta el local del Directorio solicitando una asamblea en la que los directivos rindan cuenta por los hechos de los que se les acusaban.
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Una vez que se realizó la asamblea, los bomberos manifestantes volvieron a asistir para reclamar la renuncia de los involucrados, pero la asamblea fue bastante conflictiva y no llegaron a ningún acuerdo.
Céspedes comentó que, en primer lugar, habían solicitado la recusación de los miembros del Tribunal de Justicia, por considerar que había parcialidad en la investigación. Curiosamente, los mismos miembros del Tribunal rechazaron su propia recusación, “convirtiéndose así en jueces y partes”, aseveró.
Lo correcto, según nos aseguró Céspedes que indica el reglamento interno de los Bomberos, hubiera sido que este pedido de recusación sea derivado al Directorio, y que este aparte a los miembros del Tribunal mientras decide si la recusación corre o no.
Luego, en todo caso, el Directorio debía asignar a otras nuevas autoridades para integrar el Tribunal, subrayó. Según continuó explicando Céspedes, nada de esto ocurrió.
Al momento en que él fue comunicado sobre su expulsión, inició el proceso de apelación, en el que le cuestionó a los miembros del Tribunal cómo seguían tomando decisiones sobre el caso estando recusados.
Según consta en un documento que nos mostró, la jueza instructora del sumario, capitana Luz Ocampos, reconoció que se encontraba recusada, e incluso firmó un documento en el que reconocía este hecho, a pedido del abogado defensor de Céspedes.
Otra de las irregularidades denunciadas por Gustavo Céspedes al momento de solicitar toda la documentación del proceso para apelar, fue cuando notó que algunas declaraciones de testigos que contribuyeron para la instrucción del sumario, llamativamente no figuraban en el expediente.
Entre ellas, le llamó la atención la ausencia de la declaración del capitán Roque González Vera, quien fue citado a declarar en dos ocasiones, el 30 de noviembre de 2016 y el 19 de enero de 2017, pero, por motivos desconocidos, su declaración, o su abstención de declaración, no consta en el historial del expediente, reclamó el voluntario expulsado.
Durante la visita del denunciante, se le realizó una llamada a la jueza instructora de sumario, la capitana Luz Ocampos, quien desde un primer momento dijo que el citado capitán no había declarado, sino que asistió al citatorio pero como había llegado retrasado se decidió citarlo en otra fecha, el próximo martes.
Cuando se le insistió en el punto de por qué motivo no había constando en el documento la no declaración de González, no supo precisar una respuesta, y se limitó a decir que el voluntario Céspedes podía ejercer su derecho de reclamar esta irregularidad.
Posteriormente ABC Color intentó en varias ocasiones, incluso dejando mensajes de texto, conversar de nuevo con Ocampos, pero no atendió las llamadas.
Otro hecho que reclamó hace referencia a la argumentación que brindó el directorio al momento de expulsar a los bomberos. Según indicó el denunciante, los mismos fueron acusados de cometer actos de violencia y vandalismo durante la asamblea realizada en la que fueron a manifestarse y reclamar la renuncia de las autoridades.
Por su parte ellos niegan este hecho, y se respaldan en el acta policial que fue levantada en la ocasión, en la que no se menciona en ningún momento actos violentos o hechos de sangre.
Céspedes manifestó que agotará todas las instancias de apelación en el proceso interno del reglamento de los bomberos. De no recibir una respuesta, recurrirá a la justicia ordinaria para entablar una acusación por lo que considera una “deshonra” a la que fue sometido al ser expulsado de las filas de los bomberos.
El reclamo de los bomberos voluntarios tiene raíz en hechos de corrupción en la directiva del Cuerpo de Bomberos Voluntarios del Paraguay. Por el caso están imputados los siguientes integrantes de la comisión directiva: Rafael Valdez, presidente del directorio del CBVP; Miguel Riera (vicepresidente), Carlos Torres (comandante), Luciano Florenciáñez (secretario), Mario Gini (tesorero), Daniel Aquino (comandante), Elías Ramírez, Rolando Valdez, Óscar Acuña, Alberto Meza y Alcides López.