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El ingeniero agrónomo José Bobadilla indicó que lamentablemente se ha perdido la cultura o la costumbre de contar con alguna parcela familiar, por varios factores, como desinterés, falta de promoción o apoyo.
Manifestó que, en épocas no muy distantes, las huertas eran como los supermercados de las familias. Además, sabiendo que no todo lo que se ahorra es justamente lo que sale en efectivo para ir a realizar las compras de determinados productos de la canasta básica familiar y, principalmente, en lo que respecta en la alimentación, sino que también la economía puede consistir en el trabajo que hace la familia al ir a cosechar en sus respectivas huertas.
“La municipalidad de Ayolas, tanto este año como el anterior, va a volver a apuntar a la distribución de plantines de hortalizas, pues de alguna manera eso sería un incentivo para la gente. Porque ocurre también que cuando se hace la distribución de las semillas, y al no hacerse un acompañamiento adecuado, un porcentaje bastante importante de gente no realiza el trabajo de sembrar lo que se le da”, expreso Bobadilla.
Seguidamente, comentó que el año pasado se distribuyeron cuatro especies de plantines (tomate, cebolla de bulbo, lechuga y locote) a 250 familias que directamente se encargaron de realizar la plantación, evitándose el proceso de sembrar en almácigos y de reproducir los plantines.
También se hace un complemento con otras variedades de vegetales que requieren de siembra en lugares definitivos sin necesitar de trasplantes.