La fiscal Mirta Rivas imputó a nueve agentes de la Unidad de Reducción del Microtráfico de la Secretaría Nacional Antidrogas por lesión grave este domingo. Además ordenó que los involucrados permanezcan detenidos en la comisaría de Ñemby.
Los imputados son: Virgilio Amado Chávez Ortellado, jefe de la Unidad de Reducción del Microtráfico y Luis Ángel Servián Rotela, director de Operaciones. Asimismo, los agentes Nicolás Fernando Cáceres Oviedo, Cristian Omar Morán Galeano, Miguel Antonio Chaparro, José del Rosario Sánchez, Ignacio Alcides Sosa, Emilio José Vall Sánchez y José Domingo López Orrego.
El Ministerio Público, a través de su departamento de prensa, informó que fueron incautadas las armas de los nueve funcionarios y que todos fueron sometidos a la prueba de nitrito y nitrato, para saber si dispararon.
La Senad habló en un primer momento de que un disparo hirió a las dos personas en el fallido operativo de ayer en Nueva Italia, luego hablaron de “disparos de armas de fuego”, pero la camioneta de las víctimas quedó con 18 impactos de balas, según constató el departamento de Criminalística de la Fiscalía.
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“(…) Se dió un disparo y resultaron heridas dos personas”, señalaba la Senad en un primer informe, que se dio aproximadamente a las 21:30 vía Whatsapp. Luego, en un comunicado oficial enviado a las 22:45, mencionaban que “en un confuso episodio (...) se habrían producido disparos de arma de fuego”.
El abuelo de la niña que quedó con muerte cerebral y padre del joven que está gravemente herido, Ulrrico Zanotti, ya había hablado de que fue una gran cantidad de disparos contra su camioneta y no solo uno. El hecho ocurrió ayer, aproximadamente a las 17:45, en el barrio Ita Ybaté de Nueva Italia, departamento Central.