La joven estudiante, quien en vida residía en la compañía Cabañas de Caacupé, era una persona muy querida y conocida en su comunidad. Su muerte a manos de asaltantes que la asesinaron a sangre frío con un tiro en la cabeza, al negarse a entregar su celular en una zona céntrica de la capital, conmocionó a la comunidad.
A raíz de esta situación, familiares y amigos convocaron a una manifestación y marcha por la calle Juan E. O'Leary, exigiendo justicia a las autoridades para que el crimen no quede impune y los culpables sean detenidos y condenados.
Además, exigen a las autoridades más seguridad para la gran cantidad de jóvenes que trabajan y estudian en la capital.
Un acongojado padre agradeció a todas las personas que lo acompañan en este difícil momento diciendo que esto le da fortaleza para seguir viviendo a pesar del intenso dolor que sienten con la pérdida de su hija.
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En Asunción también estudiantes de la Universidad Autónoma del Paraguay (UAP) realizaron una marcha exigiendo justicia por Nailín, quien fue estudiante de la citada casa de estudios. Marcharon desde la universidad hasta el lugar de la muerte de la joven, en Palma y Garibaldi.