En la Cámara Baja todo continuará igual. Los partidos tradicionales se repartirán los dos cupos departamentales; Pedro Alliana (reelecto) ANR y Carlos Enrique Silva (hijo del gobernador Carlos Silva) PLRA, representarán a los sureños en el parlamento.
El nuevo gobernador de Ñeembucú es Luis Benítez Cuevas (40). Es empresario de transporte y fue intendente de Pilar (periodo 2010-2015), además de miembro titular de la Junta de Gobierno por el departamento de Ñeembucú.
Sus detractores le acusan de haber endeudado a la Municipalidad durante su gestión como jefe comunal. Los ediles de la oposición hablan de una “herencia” de varios miles de millones de guaraníes.
Está casado con la abogada Laura Insfrán, tiene 3 hijos. Sus padres iniciaron la firma familiar que actualmente realiza viajes entre Pilar y Asunción, y Pilar-Encarnación, además del interior del departamento. Benítez ingresó a la política de la mano del exdiputado Benjamín Maciel Pasotti (ya fallecido), integrando su movimiento Frente Amplio. Inicialmente fue concejal municipal y luego intendente en el periodo 2010- 2015, elecciones en las que se impuso al liberal Carlos Silva, actual gobernador.
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En las últimas internas de la ANR, respaldado por el movimiento Honor Colorado fue electo para representar al partido colorado para las elecciones del 22 de abril.
El mayor desafío para las autoridades electas sigue siendo mejorar la conectividad del Ñeembucú. Deberán realizar un intenso lobby ante el nuevo Presidente para concretar en los próximos cinco años el anhelo de contar con un puente internacional, que integre al Ñeembucú con el nordeste argentino e impulse el desarrollo de la zona.
Si bien está en plena ejecución el afirmado que liberará de su aislamiento a la zona norte, integrando las mismas con la capital departamental y Asunción, en el sur los caminos son de tierra o cuentan con pésimo afirmado.
Laureles, Cerrito, Villalbín, Paso de Patria, Desmochados, San Juan de Ñeembucú, Humaitá e Itá Corá, son entre otras, poblaciones que esperan la redención, con caminos decentes. Lamentablemente los trabajos de pavimentación realizados por el MOPC uniendo Isla Umbú y General Díaz, y los realizados por la Gobernación y que van hasta Laureles Cerrito y San Juan de Ñeembucú, son realmente espantosos, siendo un serio riesgo para los automovilistas que los utilizan.
El nuevo gobernador deberá ver que solución se le puede dar a los caminos pavimentados con piedras de desecho de canteras por los actuales administradores departamentales y realizar inversiones razonables con la interesante suma que recibe anualmente la institución.
No repetir las costosas inversiones en lugares inundables, como el “mercado popular“, actualmente en construcción y por el que la gobernación pagará casi 5 millones de dólares, a la constructora BGF S.A., que es la favorita del gobernador Carlos Silva y se ha adjudicado la totalidad de las obras de mayor volumen de la institución departamental. Se espera que el nuevo gobernador imprima transparencia a sus acciones y las obras sean adjudicadas a las empresas que presentan las ofertas más convenientes y garanticen calidad en la ejecución.
En este periodo, importantes constructoras nacionales y locales han denunciado el llamativo favoritismo del administrador departamental hacia la empresa que se llevó la mayoría de los recursos que dispone la Gobernación del Ñeembucú Con relación a la educación, el gobierno departamental debe asegurar el almuerzo escolar durante todo el año lectivo, que fue un defícit del gobierno de Carlos Silva.
En cuanto a la salud, el nuevo gobernador debe ser un buen gestor ante las autoridades del Ministerio de Salud Pública para lograr que el hospital cabecera de la capital departamental, tenga crecimiento en infraestructura y cuente con todos los especialistas, para evitar que los ñeembucuences continúen cruzando el río para ir en busca de la atención a su salud en los hospitales del nordeste argentino.