De frente a la ola de calor

Las informaciones de la Dirección Nacional de Meteorología hablan de que la ola de calor instalada ya desde hace unos días llegó para quedarse. Las sensaciones térmicas máximas que se sentirán en la semana entrante irán hasta los 45° prácticamente en todos los departamentos del país.

El calor tan implacable nos expone a las afecciones conocidas como golpe de calor e insolación, que son muy frecuentes en la población. Incluso, en los centros de salud pública ya se están registrando numerosas consultas por estas patologías.

Los síntomas de ambas patologías son muy parecidos. La diferencia está en que la insolación se da por exposición directa a los rayos del sol, y el golpe de calor, cuando el cuerpo responde a temperaturas muy elevadas. Los síntomas también son muy parecidos, lo único que cambia es la causa.

El doctor Andrés Giménez, médico familiar del Instituto de Previsión Social, nos brindó algunas recomendaciones para cuidar nuestra salud en estos días en que el verano se hará sentir intensamente. Los niños y los adultos mayores son el segmento poblacional al que mayor atención debemos prestar.

Es el paso básico y clave para empezar a protegernos de la ola de calor. Si bien el profesional nos cuenta que la cantidad de agua que debe consumir la persona se evalúa según cada paciente en el consultorio, la recomendación general es beber de tres a cuatro litros de agua por día.

Contrariamente a lo que muchos creen y de hecho, solemos escuchar decir todo el tiempo a quienes nos rodean, el doctor Giménez explica que el tereré y el jugo de frutas también sirven para hidratar.

“La razón por la que algunos médicos indican que la bebida paraguaya “no cuenta” a la hora de hidratarnos, es porque al compartir un termo de dos litros, con alrededor de cinco personas, no estás recibiendo la suficiente cantidad de líquido. Sin embargo, si sos disciplinado y te asegurás de que estés tomando una buena cantidad de tereré, igual sirve”, detalló el galeno.

El aspecto un poco negativo del tereré, es que es diurético, lo que significa que a medida que lo tomamos lo eliminamos a través de la orina, cuando lo ideal sería retener el líquido. Pese a eso, el médico insiste en que la bebida típica no tiene un “efecto deshidratante” como se suele decir.

“Al paraguayo no podemos decirle ´no tomes´, porque no lo va a hacer de todos modos. Entonces les decimos, si vas a tomar, tomá bastante”, agrega el doctor.

Un tema muy hablado es el horario recomendable para exponerse a los rayos del sol, ya sea para practicar deportes o pasear. Si bien el consejo de siempre es que no se salga al exterior entre las 10:00 y las 16:00. el doctor Giménez nos indica que, en Paraguay los calores son mucho más intensos, por lo cual, desde ahora, los médicos adaptaron este margen, y piden a la población hacer caminatas u otras actividades solo desde el amanecer hasta las 09:00 y, posteriormente, después de las 17:00.

Este punto genera muchas preguntas en el consultorio, según nos contó el médico. Si bien en el mercado todavía se ofrecen productos bronceadores, con factor de protección solar muy bajo, el profesional recomienda utilizar el factor más elevado posible que encuentres en la tienda. “Si bien la protección solar que requiere el paciente es específica para cada persona, de acuerdo a una evaluación que realiza el médico en consultorio, si no podés ir a la consulta, recomendamos factor 50 o incluso factor 70 tanto para niños como para adultos”. Los calores son muy fuertes, así que, por el momento, querido lector, es mejor olvidarse del bronceado.

El doctor aclaró muy especialmente que los bebés menores de dos años no se pueden exponer al sol bajo ninguna circunstancia, ni siquiera con protección.

“En estos días estuve viendo a muchos niños pequeños en la playa. Insistimos en que los bebés, si van a ir de paseo a estos lugares de veraneo, deben permanecer bajo sombra de árboles, o en todo caso, protegidos con sombrillas”, apuntó el médico.

A propósito de sombrillas, el médico explicó que no se aconseja utilizar los conocidos paraguas de color negro para protegerse del sol, ya que la tonalidad obscura atrae mucho más a los rayos, por lo que se corre el riesgo de sufrir un golpe de calor. Siempre utilizá colores claros en tus paraguas, pues hace que los rayos del sol reboten.

La misma regla se aplica para las prendas que vamos a vestir en estos días. Las camisetas y pantalones deben ser claros y de algodón, que nos permita estar lo más aireados posible. Si vamos a caminar en un horario de mucho sol, es fundamental utilizar camisas con cuellos y mangas largas, para evitar quemaduras. Eso sí, las camisas deben ser de algodón y telas frescas.

Al igual que los pequeños, se recomienda directamente la no exposición al sol. Además, lo mejor es que eviten las actividades físicas fuera de la casa. Sí, pueden realizar ejercicios de baja intensidad dentro del hogar, bajo sombra.

“Los niños y adultos mayores son los que más rápido se deshidratan. A los 20 minutos de deshidratación ya empiezan a sufrir síntomas como mareos, alucinaciones, somnolencia, falta de apetito, y aumento de la temperatura corporal, no por fiebre común, sino otro tipo de fiebre que viene de adentro, que genera una temperatura elevada en el cerebro”, señaló el doctor Giménez.

Si bien en su trayectoria profesional no conoce ningún caso de muerte por golpes de calor, el médico explica que muchas personas han llegado a estar muy graves a consecuencia de esta afección. Según nos mencionó, es muy común en el caso de los adultos jóvenes, estar sufriendo golpes de calor y no percatarse. “Esto se ve en obreros que trabajan todo el tiempo sobre techos, expuestos a los rayos solares. Como los síntomas son leves, las personas continúan con sus actividades diarias sin preocuparse demasiado, lo cual no es correcto”.

Para evitar agravar la patología, el profesional recomienda visitar el consultorio ante el menor síntoma, por más leve que sea.