“Si tenemos que centrar la atención tenemos que centrar al sur, sin descuidar por supuesto Asunción. Aquí tenemos los bañados Norte y Sur que con 5 metros y medio igual genera complicaciones, personas desplazadas”, advirtió Julián Báez, director de la Dirección de Meteorología e Hidrología respecto a los pronósticos de lluvias y crecidas para los próximos meses.
“En el sur tenemos alturas de 6,8 metros en Pilar y más o menos el mismo orden en Alberdi. En el sur, con las proyecciones de lluvias que tenemos en los próximos días, la situación puede complicarse un poco más porque tenemos dos factores, la lluvia que se está concentrando en esa zona y la crecida estacional. Todo lo que se está acumulando acá (en Asunción) se va a trasladar hasta Pilar”, remarcó.
Para empeorar la situación en la ciudad donde se encuentran los ríos Paraguay y Paraná, aún se esperan las crecidas en el Este, hacia el Brasil, que repercutirán principalmente en el río Paraná, que funciona como una barrera para el cauce del Paraguay.
“Esas posibles crecidas, en que en este momento ya se ven en el Paraná, llegan a la confluencia con el Paraguay y generan un efecto que se conoce como remanso, y eso genera un atascamiento del río Paraguay, porque en la confluencia tenemos alrededor de 15.000 metros cúbicos por segundo del Paraná contra los 6.000 metros cúbicos del Paraguay, entonces hay mucho más caudal del Paraná, lo que hace que el agua del Paraguay no drene tan rápidamente, y esa es la situación que puede complicar Pilar, además de la lluvia”, explicó.
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En Asunción, si bien el nivel del río es superior a lo estimado para esta época, la cantidad de agua que generalmente suele venir de Brasil no llegó, por lo que la situación no llegará a los niveles críticos alcanzados desde el 2014 al 2016 en la Capital. “No tenemos condiciones para decir que vamos a tener una crecida extraordinaria en Asunción por lo menos”, remarcó.