Vecinos de barrio Obrero denunciaron a ABC Color que todas las noches, varias personas con sus respectivos vehículos se reúnen frente a dos bodegas instaladas sobre la calle Estados Unidos y escuchan música a un volumen alto, principalmente en un horario en el que muchos ya buscan descansar.
De acuerdo al reclamo de uno de los vecinos los inadaptados se instalan para beber y quedan ahí hasta las 6:00, realizando todo tipo de disturbios e incidentes, incluso sus necesidades fisiológicas en plena vía pública.
Manifestó que suelen denunciar estos hechos a la Policía Nacional sin embargo no reciben ni respuesta ni solución al problema. Comentó que la zona es límite jurisdiccional entre las comisarías 4ª y 18ª Metropolitana. Anteriormente, los uniformados acudían, pero últimamente ya no se movilizan.
Ante esta fatal de respuesta, el vecino acudió hasta la Unidad de Convivencia de las Personas de la Fiscalía, ubicada en Sajonia, cuyo encargado de despacho es el fiscal Emilio Fúster. El ciudadano fue atendido por la asistente del agente, Marisol Flores, según señaló, quien le indicó que la policía solo puede apercibir verbalmente en estos casos.
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Ante este contexto, vale mencionar que existe la Ley Nº 1.100/97 “De prevención de la polución sonora”, que en su artículo 1º manifiesta “Esta ley tiene por objeto prevenir la polución sonora en la vía pública, plazas, parques, paseos, salas de espectáculos, centros de reunión, clubes deportivos y sociales y en toda actividad pública y privada que produzca polución sonora”;
Asimismo en su artículo 2º expresa claramente que “Queda prohibido en todo el territorio de la República, causar ruidos y sonidos molestos así como vibraciones cuando por razón de horario, lugar o intensidad afecten la tranquilidad, el reposo, la salud y los bienes materiales de la población”.