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Oficialmente éste jueves se puso en funcionamiento, en presencia del padre Aldo Trento, director de la Fundación San Rafael. El equipo de origen italiano fue enviado por su santidad para que el sacerdote disponga de él, quien decidió donarlo al centro médico de cuarto nivel del Ministerio de Salud Pública, que de ésta manera es el primero del servicio público en contar con dicha tecnología.
El viernes 11 se hizo la primera intervención, y éste jueves 17 la beneficiada fue una paciente de 25 años, en un acto que fue presenciado por el sacerdote que estuvo observando con mucha emoción en el quirófano. “Hoy después de tanta batalla agradezco a los profesionales y en especial al doctor Pusineri, que hizo el procedimiento y es difícil describir lo que se ve, la chica beneficiada mañana ya se va a su casa”, resaltó.
Trento dijo quedó maravillado del trabajo que realizan los profesionales y agradeció al ministro por haber escuchado su plagueo de que comience a poner en condiciones los equipos, casi todos caídos ya, del centro médico para que los doctores puedan hacer su trabajo de alta complejidad en beneficios de los pobres enfermos.
“Yo cuestionaba por qué no se ponían los equipamientos para que ellos puedan hacer tantas cosas, que son hasta si se quiere milagrosas”, subrayó. Añadió que la donación es una prueba más del gran cariño y amor, que Bergolio siente por el Paraguay.
Manifestó su contento porque éste viernes la joven ya podrá volver a su casa, con un problema de salud resuelto.
“Hoy después de tanta batalla agradezco a los profesionales y al doctor Pusineri, que hizo el procedimiento y es difícil describir lo que se ve, la chica beneficiada mañana ya se va a su casa”, acotó. Agradeció al ministro Barrios por haber escuchado su plagueo, porque el Nacional tiene médicos muy capaces.
El equipo, cuyo costo ronda los 50.000 dólares, permitirá acortar la larga lista de espera que supera los 70 enfermos que padecen la afección y que debían de esperar por meses por una cirugía, destacó el director del Hospital Nacional, Dr. Hernán Martínez. En un privado un procedimiento de éste tipo cuesta entre 10 a 14 millones de guaraníes, y en el hospital es gratis.
Martínez explicó que el procedimiento no es cruento, porque se realiza a través de un elemento que se llama ureteroscopio, que emite una luz láser que destruye el cálculo renal (piedra) y posteriormente cae con la orina, no existe dolor y tampoco prácticamente molestia cuando es desechado.
El urólogo y cirujano, Hernando Pusineri, manifestó que la dirección del hospìtal se propuso y está llevando a cabo el aumento de camas en urología, que es una especialidad que tiene un déficit en el país. Con este aparato lo que hace es que el paciente salga de alta más rápido, y puede ser intervenidos más pacientes.
No se trata simplemente de tener más camas sino que la tecnología hace que la rotación sea más rápida, entonces más pacientes van a poder ser más atendidos y con sus problemas solucionados”, destacó el doctor Pussineri.
Por otro lado, mencionó que gracias a la donación, que es un avance tecnológico muy importante, aprovecharon y solicitaron al Ministerio de Salud que haga la reparación de todos los equipos que estaban en su mayoría caídos por su uso excesivo. Dijo que recibieron una respuesta favorable del ministro de salud, Antonio Barrios.
“Aparte de ser una bendición por la tecnología y una bendición por la puesta a cero de todos nuestros equipos, lo que va a implicar darle una mejor atención a todos nuestros los pacientes”, acotó.
Muchos de los pacientes con insuficiencia renal crónica son pacientes son portadores de cálculos renales, lo que hace que el riñón comience a disfuncionar y lleve a una diálisis.