/arc-anglerfish-arc2-prod-abccolor.s3.amazonaws.com/public/GRJZIKZ4OZEGZIIZSL52BEARCU.jpg)
Cargando...
Además, solicitaron la destitución inmediata de la directora de Recursos Humanos, Yolanda Paredes, al alegar “tratos denigrantes” a los funcionarios.
Durante la sesión de la Junta Municipal convocada esta tarde, los concejales opositores Perla Rodríguez de Cabral (ANR), Lilian González de Aguinagalde (ANR), Juan Ángel Núñez (ANR), Miguel Coronel (ANR), Nery Chávez (ANR) y Alejandro Zacarías (ANR) aprobaron la propuesta de presentar la denuncia en la Cámara de Diputados y en la Contraloría. Igual postura asumieron Javier Bernal (PLRA) y Celso Miranda “Kelembu”.
Los ediles opositores indicaron que el intendente Prieto desvinculó “arbitrariamente” al asesor jurídico de la Junta, Mario Escurra. La concejala proponente González de Aguinagalde sostuvo que esa situación “amerita la intervención”, pero que le “van a dar una oportunidad” al intendente.
Igualmente, los opositores aprobaron otra minuta presentada por González de Aguinagalde para pedir la inmediata destitución de la directora de Recursos Humanos, Yolanda Paredes, por supuestamente maltratar a funcionarios.
La denuncia contra Prieto y el pedido de destitución de Paredes se produce luego de la desvinculación de supuestos planilleros de la Municipalidad esteña. Según los datos, los concejales tienen a centenas de operadores políticos con salario municipal y sin funciones específicas.
La propia González de Aguinagalde reconoció que pidió la contratación de sus correligionarios en la Municipalidad. Minimizó esa práctica prebendaria al considerar que “todos (los concejales) hacen eso”.
Durante la gestión de la intendente interina Rodríguez de Cabral más de 1.200 operadores políticos fueron contratados sin previsión presupuestaria y sin asignación de funciones. La incorporación masiva de hurreros coincidió con la precandidatura de González de Aguinagalde en las internas y con postulación de Wilberto Cabañas (ANR) a la intendencia.
La directora de Recursos Humanos de la Municipalidad esteña, Yolanda Paredes, defendió su trabajo y acusó a los concejales colorados de llevar a cabo una persecución contra la nueva administración comunal porque “metimos la mano en su olla”.
Opinó que la Municipalidad de Ciudad del Este era poco más que una “seccional colorada” y que durante la administración interina de Perla de Cabral al frente de la Intendencia hubo malversación de fondos, en especial en la contratación de nuevos empleados con fines políticos.
“Tenemos que reducir drásticamente (la cantidad de funcionarios municipales) para llegar a fin de año”, dijo Paredes, que señaló que debido a los gastos desmedidos la Municipalidad está en “quiebra técnica”.
Paredes estimó que al menos unos 1.000 funcionarios tendrán que ser desvinculados, teniendo en cuenta que no se puede despedir a personas embarazadas, madres de hijos con discapacidades o funcionarios afectados por servicios básicos de la Comuna.
Eso, dijo, sin siquiera entrar a tocar a planilleros y “hurreros” del clan Zacarías, gente con más de seis meses de antiguedad que deberá ser sometida a sumarios antes de que sea posible desvincularlos.
Paredes aseguró que la administración del intendente Prieto buscará contratar “el mínimo posible” de gente, aunque señaló que los directores necesitan personal de confianza.
“Acá te das la vuelta y te roban”, ironizó.
Sobre la reacción de los concejales del Partido Colorado, dijo que era de esperarse debido a que la ANR va a ser el partido más afectado por las medidas, pero “eso no es culpa mía, eso es culpa de ellos mismos, ellos crearon este monstruo y ahora les quiere comer”.