“La verdad es que yo no tenía ni idea (de su liberación). Me llevaron 200, 300 metros, me dejaron, luego me volvieron a recoger y caminamos tres noches. La noche del 23… El 24 pasamos caminando de noche, el 24 (de diciembre) fue desesperante. Escuchaba las bombas, la farra. Me quería morir. Estaba muy desanimado para caminar ese día. Llegó la tardecita y me sacaron mi bolso (grande) y me dejaron con el que me habían llevado. Luego caminé y escuché los camiones, ahí me di cuenta que tal vez me iban a liberar”, dijo Arlan en conversación con Telefuturo.
“Faltando 100 metros (de asfaltado) no sabía si correr o llorar. Cuando me soltaron, vi una colonia, y caminé hasta que encontré a una persona. Ahí me dijo ‘¿vos sos Arlan?’ y le dije que sí. Ahí le pregunté si me podía prestar su teléfono y me dijo ‘sin problema’. Él (la persona fue identificada como Wemerson Almeida) estaba comiendo torta y me dijo ‘¿no querés un poco?’ y le dije ‘gracias’. En ese momento no podía comer nada”, dijo Arlan.
Arlan Fick inició en la mañana de este sábado la repartija de canastas de navidad en la colonia Nueva Esperanza como parte de la “sugerencia” hecha por el EPP.