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La falta de limpieza de la sala de operaciones podría facilitar el brote de una infección intrahospitalaria. Según una fuente, la sala permanece sucia por varios días, similar panorama se observa en los pasillos y en los sanitarios.
En el hospital reina el caos total porque los funcionarios hacen los que quieren y además faltan limpiadoras. Igualmente, según los datos, varias cirugías ya fueron suspendidas por qué la sala normalmente se encuentra sucia y a los pacientes se los deriva a otros centros sanitarios en Caazapá o Villarrica.
Muchos de los pacientes igualmente son derivados directamente a clínicas privadas de los mismos funcionarios de blanco del hospital. Cada médico cuenta con su clínica particular o consultorio, hasta donde son enviados los pacientes para su tratamiento.
Otro hecho, es que del predio del hospital semanalmente se roban motocicletas de los pacientes, parientes o de los mismos funcionarios. El hospital no cuenta con seguridad policial ni privada. Los robos ocurren semanalmente, señalaron.
Tratamos de hablar con la directora de la institución, Roselaida Ruiz Díaz, pero no atendió la llamado. En tanto que, Manuel Paredes, administrador del hospital, quien aclaró que está de vacaciones, dijo que hay limpiadoras; sin embargo reconoció que faltan más.